China baja las reservas mínimas de la banca para mejorar la liquidez en el mercado

El gobernador del Banco Popular de China (BPC, banco central), Pan Gongsheng, anunció este miércoles una rebaja de 50 puntos básicos a los requisitos de coeficiente de caja (RRR, porcentaje de fondos que un banco no puede prestar) de las entidades financieras a partir del 5 de febrero.

En una rueda de prensa, Pan apuntó que esta medida se traducirá en una inyección de un billón de yuanes (141.044 millones de dólares, 129.686 millones de euros) en liquidez para el mercado a largo plazo.

Asimismo, la institución aplicará desde mañana una rebaja de 0,25 puntos porcentuales a las tasas de représtamo y redescuento para pequeñas empresas y negocios agrícolas hasta el 1,75 %, agregó el gobernador.

El BPC llevó a cabo dos recortes a los RRR a lo largo de 2023, el último de ellos en septiembre, cuando bajó 0,25 puntos hasta un 7,4 %, aunque algunas entidades ya se beneficiaban de una tasa especial del 5 %.

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Hacia finales del año, algunos analistas apuntaban que el banco central estaba planteándose una rebaja precisamente de 50 puntos básicos para los RRR con el objetivo de liberar liquidez adicional ante el aumento de la emisión de bonos por parte de las autoridades locales y regionales del país.

“Emplearemos herramientas variadas para mantener una liquidez abundante en 2024″, indicó hoy Pan, que avanzó que el siguiente paso será “reforzar el seguimiento de los riesgos financieros y mejorar las capacidades de alerta temprana y evaluación”, recoge la prensa local.

Tras el anuncio, el índice de referencia de la Bolsa de Hong Kong, el Hang Seng, pasó de ganar un 2 % a cerca de un 4 %, aunque cerró ligeramente más abajo, con un repunte final del 3,56 %.

En la rueda de prensa, Pan también desveló la creación de un departamento del mercado de crédito dentro del BPC, centrado en la financiación de tecnología, iniciativas verdes e inclusivas, pensiones y programas digitales.

Asimismo, el gobernador apuntó entre sus objetivos mantener la tasa de cambio del yuan en un “nivel razonable y equilibrado” -una de las razones por las que el banco central no ha bajado sus tipos de interés es la presión bajista sobre la divisa nacional, según analistas- y continuar con una política monetaria “prudente”.

En su opinión, la diferencia de ciclos entre las políticas monetarias de China y Estados Unidos tenderá hacia la convergencia a lo largo de 2024, lo que otorgará a Pekín una “mayor autonomía” en este campo, gracias a un mayor margen de maniobra.