Nunca es mal momento para dejarse llevar por la magia del cine. Dicho de otra forma: una pandemia puede ser el mejor momento para entregarse a esa magia. Así la pantalla sea más chica, el sonido menos profesional y la butaca menos sofisticada, aún la ficción puede salvar vidas. Tres recomendaciones a modo de rescate para ustedes:
AYA (Francesca Canepa, Perú, 2016)
La directora Francesca Canepa ganó con este corto media docena de premios, tanto nacionales como internacionales. En sus concisos nueve minutos cuenta la historia de Juan, un niño cusqueño cuyo único objetivo es cumplir el último deseo de su madre a como de lugar.
El cortometraje aprovecha el paisaje andino, la fotografía y el trabajo de sonido para hacer que los espectadores empaticen con una historia en la que hay espacio para la subjetividad y para lo onírico. Las imágenes, trabajadas con pulcritud, desentonan con la desgracia de Juan y su madre, haciéndonos ver el trabajo del niño en un salar de una forma casi romántica. No hay espacio para la tristeza grandilocuente en esta historia triste, endulzada con la inocencia infantil. La historia, narrada íntegramente en quechua, está disponible gratuitamente con subtítulos en castellano.
El más reciente trabajo de la directora, el cortometraje El silencio del río, está recorriendo un exitoso camino en el extranjero, buscando una nominación a los Premios Óscar 2021. En esta nueva producción, Canepa vuelve a contar una historia a través de los ojos de un niño y la relación con su padre, esta vez en la selva. Atentos quedemos.
ENORME (Sophie Letourneur, Francia, 2020)
Es una feliz noticia que My French Film Festival cumpla ya 11 años exhibiendo para Latinoamérica películas francesas de forma gratuita. Esta edición, que finaliza el 15 de febrero, trae una sustanciosa selección de 13 largos y 20 cortometrajes.
Hoy, provoca recomendar Enorme: Con 40 años, a Frédéric le entran unas repentinas ganas de tener un hijo. Él y Claire ya lo habían dejado claro, Claire nunca ha querido ser madre. Sin embargo, Frédéric comete el imperdonable error de dejarla embarazada sin avisarle.
Lo interesante de Enorme es que presenta desde el inicio, en clave de comedia, una situación para el análisis: la subordinación de la mujer. Los deseos de Claire, a pesar de ser talentosa como pocas y exitosa como nadie, no son realmente tomados en cuenta por su marido, quien, bajo la imagen del hombre sacrificado y entregado a ella, crea una situación en la que la única agencia de la esposa es satisfacer los deseos del marido, pues él se encarga de quitarle, desde el inicio, cualquier poder de decisión. ¿Podemos reírnos de lo que dice esta película en el fondo? Creo que su mayor virtud tiene que ver con regalarnos una sonrisa en el marco de la ficción sin dejar de lado la violencia subyacente que denuncia. Destacable también la inexistencia de la romantización de lo que significa ser madre. Como bien se dice: la maternidad será deseada o no será.
EMMA (Autumn de Wilde, Estados Unidos, 2020)
Esta adaptación en color pastel de la famosa novela de Jane Austen llega de la mano de la directora Autumm de Wilde, más conocida en los Estados Unidos por su trabajo como fotógrafa de celebridades musicales y directora de videoclips de bandas como Florence + The Machine. Tal vez es por esta razón que esta nueva adaptación —la tercera a la gran pantalla— de Emma cuenta con imágenes de fotografía preciosista.
Protagonizada de forma exquisita por Ana Taylor Joy, la música marca el ritmo con el que se cuenta la historia, donde todos los personajes están dispuestos de tal forma que la protagonista no deja nunca de brillar, incluso cuando no está en escena. Bien merecida su nominación a los Globos de Oro como mejor actriz de comedia o musical.
¿Dónde encontrarla? En HBO Go.