¿Cuál era el secreto del poderío de los guerreros aztecas? ¿Cómo hacían los gladiadores romanos para ganar masa muscular y prepararse para entrar a la arena? Pues su alimentación fue fundamental para potenciar su resistencia y poderío. El portal de la revista Mens Health nos cuenta cuáles eran los alimentos fundamentales en sus dietas. Además, te explicamos cómo puedes incluirlos en tu alimentación.
LOS AZTECAS Y SUS PODEROSAS SEMILLAS Antes de la batalla, los guerreros aztecas solían consumir semillas de chía para tener más energía y resistencia. Este superalimento se caracteriza por tener 100% más potasio que el plátano, 100% más fibra que cualquier cereal, 200% más hierro que la espinaca, 700% más omega 3 que el salmón, 800% más fósforo que la leche completa, entre otras grandes propiedades. Por otro lado, la quinua era también fundamental en la alimentación de estos combatientes.
Para recibir todos los nutrientes de las semillas de chía, consume una cucharadita diaria. El día anterior, en la noche, remoja en agua este alimento y por la mañana mézclalo con un jugo de frutas o con cualquier otro líquido, según explica Diana Plasencia, blogger de Oveja verde. Consumirlas antes de ejercitarte te ayudará a tener más resistencia.
LOS GLADIADORES Y EL SECRETO DE SUS MÚSCULOS DE ACERO Los gladiadores romanos conseguían ganar masa muscular consumiendo una dieta rica en cebada. Además de potenciar la energía, este cereal ayuda a que el cuerpo produzca más vitamina K, la cual mejora la coagulación de la sangre.
Mens Health recomienda incluir unos 50 gramos de cebada en sopas ricas en proteínas.
LOS VIKINGOS Y SU ARMA SECRETA La fuerza de los vikingos se debía en gran parte a su dieta, protagonizada por el arenque y la col rizada. Ambos alimentos contienen electrolitos capaces de mejorar la conductividad muscular. Además, la col se caracteriza por contener grandes cantidades de calcio, hierro y potasio.
Si no consigues arenques, puedes comer también sardinas, las cuales tienen propiedades similares. Mens Health recomienda cocinar este pescado y la col rizada al vapor y servirlos junto a una vinagreta, ya que el ácido acético que esta contiene ayuda al cuerpo a absorber mejor los minerales. Preparar una ensalada utilizando estos ingredientes también es una muy buena opción.