El colectivo Les Gueules Cassées (“Las bocas rotas”) es una asociación de productores franceses que busca poner en valor las frutas y verduras que son dejadas de lado, simplemente, por el hecho de ser menos bonitas. ¿Cómo convencen al consumidor de llevarlas a casa? Ofreciéndolas a precios entre 20 y 30% menores que los convencionales.
No discriminar para no desperdiciar
Según cifras de la FAO, aproximadamente un tercio de la producción mundial de alimentos se desecha cada año. En respuesta a ello, así como a la lenta recuperación de la crisis económica europea, los productores franceses, reunidos bajo la marca “Quoi ma gueule?” (algo así como “¿Qué pasa con mi boca?”) han decidido poner en venta estos estas frutas y verduras ‘feas’. De esta manera, alimentos que, de otra forma, acabarían en la basura, pueden llegar a ser conocidas y aceptadas por el consumidor final.
Los alimentos han sido clasificados en tres categorías: aquellos que tienen un defecto en su aspecto, los que son de menor tamaño y un poco menos bonitos, y los que tienen marcas debido a los efectos de su exposición al medio ambiente, como lluvia, granizo o viento.
La idea que intentan promover estos productores es que se trata de alimentos igualmente sabrosos, pero menos caros.
En el Perú, algunos restaurantes compran en los mercados mayoristas frutas y vegetales de “segunda categoría”, es decir, que son perfectamente aptos para el consumo humano, pero que, debido a su aspecto, suelen ser rechazados por los supermercados o amas de casa. En estos casos, también se trata de insumos de calidad y más baratos.
Si existiera una marca que agrupara vegetales poco atractivos visualmente y los vendiera en supermercados y bodegas, ¿comprarías sus productos?
(¿Buscas ideas para usarlos? Menú Perú te sugiere probar esta mermelada, un queque, un pastel de verduras o una salsa para pasta).