Muchas veces parece todo un reto tratar de poner límites o fijar normas con un hijo adolescente, quien solo muestra rebeldía, conflictividad y desafío hacia la autoridad. Todas actitudes propias de la edad por la que atraviesa.
En esa línea, expertos de la psicología han visibilizado los errores en que suelen caer los padres a la hora de tratar de enderezar el comportamiento de un joven o solo para tener un impacto muy positivo en el desarrollo de un hijo que está próximo a la adultez.
Errores a la hora de establecer límites con adolescentes
Reglas ambiguas
Quizá este sea uno de los problemas que más se repiten en las familias. No dejar en claro las normal o reglas del hogar puede desencadenar más conflictos ya que se puede prestar a la interpretación de cada persona.
Por ejemplo, decirle solo “haz caso” o “pórtate bien” deja margen de maniobra según crea conveniente el adolescente. No hay referencias o mayor información para cumplirlas, además que suenan a palabras vacías. Como padre, sé especifico con tus pedidos y reclamos.
No explicar el porqué de cada regla
Es esencial que las reglas tengan una explicación fundamentada que justifique su existencia. Si no se proporciona un razonamiento válido, las normas pueden percibirse como una imposición y un abuso de poder por parte de los adultos. Esto puede predisponer a los adolescentes a rebelarse contra la imposición de reglas que parecen carecer de sentido o ser arbitrarias.
Castigos nada aleccionadores
Nunca un castigo debe ser una reprimenda física o humillante. En su lugar, debes tratar de que sirva para que un adolescente reflexione sobre sus actos, por lo que siempre deben ir acompañados de una explicación de por qué estás tomando esa medida en su contra.
Trata de que tu hijo adolescente entienda en qué ha fallado y cuáles son las consecuencias de esas conductas inadecuadas. De lo contrario, el menor nunca entenderá tu punto de vista.
No ser consecuentes
Si antes ya has sancionado una actitud o comportamiento, no volver a hacerlo te deja como una persona inconsecuente y confunde a tu hijo. Por tal motivo, es importante que las normas sean implementadas de manera efectiva.
Asimismo, es necesario ser realistas al establecer las normas, evitando que sean demasiado fáciles o difíciles de cumplir. Si se vuelven demasiado difíciles, es probable que nos rindamos en el intento de aplicarlas debido a la incomodidad y las dificultades que surgen al tener que castigar o criticar constantemente el comportamiento del adolescente.
Evitar ser el ejemplo
Es importante dar el ejemplo y participar en las reglas que tú mismo has colocado. Trata de no salirte de las pautas de conducta impuestas para toda la familia. En caso de no cumplir con dichos límites, debes demostrar que eres conscientes de que has obrado mal.
TE PUEDE INTERESAR
- Privacidad: ¿Es correcto revisar el teléfono celular de mi hijo adolescente?
- Cómo el bullying escolar afecta a toda una familia
- Duelo: ¿Cómo las madres pueden lidiar con la desvinculación de sus hijos después de un divorcio?
- Cuidados esenciales: ¿Qué precauciones se deben tomar con un bebé recién nacido?
- ¿Qué pasa si a una mujer embarazada le da cáncer?
Contenido Sugerido
Contenido GEC