Nuestra sociedad está modelando en los jóvenes una tendencia al abuso de drogas y alcohol, lo que deriva inevitablemente en un gran déficit a nivel de seguridad ciudadana, según la directora de Cedro, Carmen Masías.
La delincuencia, por estos motivos, tiene un rostro joven a nivel nacional. La falta de una adecuada educación moral en los hogares afecta a los menores de edad y los puede perjudicar en la formación para el resto de sus vidas.
“Los adolescentes peruanos de 17 años, según estudios realizados, tienen una escala moral similar a la de niños de 5 años. Eso es reflejo de una pésima educación moral en el país”, señaló durante Segundo Congreso Internacional de Psicología de la Universidad César Vallejo.
Masías destacó la importancia de que las familias sean democráticas, incentiven al diálogo, a la buena educación y el acceso a espacios de convivencia seguros. “Hay que remarcar que la estructura de las familias no es un factor determinante para esta problemática. No necesariamente un divorcio desencadena en el abuso de sustancias psicoactivas en los hijos”, detalló la funcionaria.