
Joshua, quien nació en la ciudad de Huaraz con un peso de 2 kilos 800 gramos, se jugó la vida a los pocos días de nacer, ya que fue sometido a una cirugía de corazón abierto, cuyo órgano tuvo que ser detenido por 45 minutos, tiempo en que dependió de una máquina de circulación extracorpórea que reemplazó su corazón y sus pulmones. La exitosa operación, que corrigió la cardiopatía congénita que tenía, estuvo a cargo de un equipo multidisciplinario cardiovascular del Instituto Nacional de Salud del Niño (INSN) de Breña, más conocido como Hospital del Niño.
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A los pocos días de nacer, el bebe empezó a tener dificultad respiratoria y agitación con llanto intenso, por lo que inmediatamente le realizaron diferentes exámenes e ingresó a la unidad de cuidados intensivos (UCI) del hospital de Huaraz.
Los médicos de Huaraz no le daban esperanza a los progenitores de que el bebé sobreviviera, además que no había especialistas en la región. Ante ello, se realizaron dos teleconsultas con los especialistas del INSN de Breña y así decidió referir al pequeño a Lima.
Los cardiólogos realizaron a Joshua diferentes exámenes médicos, entre ellos un ecocardiograma, y le diagnosticaron hipoplasia de arco aórtico y comunicación interventricular, por lo que requería ser operado de inmediato, informó el médico cirujano, Jesús García Pinzás, jefe del Servicio de Cirugía de Tórax y Cardiovascular.
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“La aorta es la arteria más grande e importante de todo el cuerpo. Sale del ventrículo izquierdo y lleva sangre oxigenada (roja) a todo el organismo. En el caso de Joshua la arteria que tenía era muy pequeña y no permitía que la sangre llegara a todo el cuerpo, como son los riñones, cerebro y otros. Ha sido una cirugía de alta complejidad, incrementando la complejidad por el bajo peso del bebé. También le realizamos una corrección de una comunicación intraventricular en el corazón”, explicó García Pinzás.
“Realmente se jugó la vida (el bebe) en esta cirugía. Si no se operaba a Joshua a temprana edad, lo hubiéramos perdido, ya que la aorta es la principal arteria del organismo que irradia sangre a todo el cuerpo”, dijo el jefe del Servicio de Cirugía de Tórax y Cardiovascular.
El especialista precisó que en esta cirugía a corazón abierto se requirió el uso de la máquina de circulación extracorpórea. “Para realizar las técnicas quirúrgicas en el interior del corazón, los cirujanos necesitamos trabajar en un corazón sin sangre y quieto (sin latir). Usamos la circulación extracorpórea, que es una máquina que hace las veces de corazón (impulsa la sangre a presión), pulmón (la oxigena) y riñón si es necesario (la filtra). En el caso de Joshua, su corazón estuvo detenido 45 minutos”, precisó.
El éxito de la cirugía ha sido posible gracias al trabajo de un equipo multidisciplinario, como son los médicos cardiólogos con un adecuado diagnóstico, el equipo quirúrgico conformado por los cirujanos, anestesiólogos, instrumentistas y el equipo de la Unidad de Cuidados Post Operatorios Cardiovasculares.
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