La recordada actriz Kirstie Alley falleció el pasado lunes 5 de diciembre a la edad de 71 años, dejando un extenso legado en la actuación, tanto de películas, como series de televisión que hasta la actualidad siguen siendo retransmitidas en diferentes partes del mundo.
De acuerdo a un comunicado publicado por sus hijos, True y Lillie Parker, la artista estuvo rodeada por su familia en los últimos momentos que estuvo con vida, por lo que tuvieron la oportunidad de despedirse.
Eso no es todo lo rescatable de dicha comunicación compartida en las redes sociales. Y es que allí se habla de la causa del fallecimiento de la Kirstie Alley, por lo que ahora mencionaremos ese punto.
¿DE QUÉ MURIÓ KIRSTIE ALLEY?
En el comunicado que fue publicado en las cuentas de redes sociales de Kirstie Alley, sus hijos revelan a sus fanáticos y amigos en general que ella estaba luchando contra un cáncer de colón, pero finalmente no pudo resistir más.
Según la información brindada por ellos, esta enfermedad se le había descubierto hace poco y no fue de conocimiento público hasta el fatal desenlace, el cual terminó con su vida a inicios de diciembre.
“Con mucha pena informamos que nuestra increíble, fuerte y amorosa madre ha fallecido tras una batalla contra el cáncer que le fue descubierto recientemente”, fueron algunas de las palabras del comunicado.
El cáncer de colon es el tercer cáncer más común en el mundo. Muchas de las personas que padecen esta enfermedad no experimentan síntomas en las primeras etapas de la enfermedad.
LA CARRERA DE KIRSTIE ALLEY
Kirstie Alley apareció en trabajos con personajes menores a inicios de los años 80, hasta que en 1987 fue contratada para protagonizar la serie “Cheers”, considerada como una de las producciones televisivas más exitosas de los Estados Unidos.
Bajo el personaje de Rebecca Howe, una camarera un tanto desesperada, alcanzó la fama que tanto soñaba y, posteriormente, fue ganando papeles más importantes en el mundo de la actuación.
Fue así que llegaría su papel más recordado en el cine en 1989 gracias a “Mira quién habla”, en la que fue la protagonista. El éxito de esta película fue tan grande que los productores armaron dos secuelas más, en las que ella también encarnó a uno de los personajes principales.
En 1991 fue reconocida con un Emmy por mejor actriz de una serie de comedia por su papel en “Cheers”. Ese mismo año también se llevó un Globo de oro en la misma categoría.
En 1994 llegaría su segundo premio Emmy por mejor actriz de miniserie o telefilme por su papel en “David’s Mother”.