Aunque han pasado más de 50 años de su muerte, Walt Disney seguirá siendo recordado como la figura más importante en la historia del cine de animación. Y no es para menos, pues a lo largo de su vida recibió 59 nominaciones a los Premios Oscar y ganó 22 estatuillas, un récord en la historia de la pantalla grande, convirtiéndose en un ícono por el gran legado que dejó.
Tras su fallecimiento en diciembre de 1966, a consecuencia de una insuficiencia circulatoria provocada por el cáncer de pulmón, algunas leyendas urbanas han girado en torno a este personaje; una de ellas es la que asegura que él no fue incinerado, sino “congelado” a la espera de que la ciencia pueda curarlo. A pesar de que su hija Diane salió a aclarar que todo era mentira, hasta el día de hoy, hay quienes piensan que es verdad.
Otra de las cosas que se ha dicho sobre este personaje es que habría realizado viajes a México durante la Segunda Guerra Mundial, algo que varios consideran una mentira, pero te contamos que éstos sí se llegaron a dar. A continuación, la verdad detrás de las visitas al país azteca que realizó la leyenda de la industria de animación.
WALT DISNEY EN MÉXICO
Si bien, Walt Disney reflejaba en sus películas para niños y público en general la inocencia y fantasía, la labor que le habían encomendado era todo lo contrario, pues tenía como misión convertir a México en un aliado de Estados Unidos durante la Segunda Guerra Mundial, publicó Milenio.
Por el año 1941, el cineasta había sido nombrado por el entonces presidente Franklin D. Roosvelt como Embajador de Buena Voluntad, y al haber sido incluido en su Programa del Buen Vecino, él tenía que viajar por varios países de Latinoamérica para convencer a sus autoridades de no vender petróleo a las potencias del Eje Roma-Berlín-Tokio, sus oponentes.
Es así que llega a Ciudad de México en 1941. Y pese a que tenía dicha misión, ésta se transformó en un viaje creativo, según relata el Walt Disney Family Museum.
El creador de Mickey Mouse viajó con un grupo de artistas de su compañía para que desarrollen historias basadas en la cultura de las naciones que visitaron.
Producto de ello, resultó el largometraje “Saludos amigos”, estrenado en Río de Janeiro en 1942, y posteriormente, en 1944, “Los tres Caballeros”. Este último se realizó en teniendo a México como inspiración; ya que, entre sus tres protagonistas, además del pato Donald y el loro brasileño José Carioca, se incluyó un nuevo personaje bautizado con el nombre de Panchito, un gallo charro mexicano.
Este filme estuvo inspirado en la cultura mexicana y da realce a varios lugares como Ciudad de México, Acapulco y Veracruz.
VISITÓ LA BASÍLICA DE GUADALUPE
Durante esas visitas, en 1942 llegó a la Basílica de Guadalupe, donde se tomó una fotografía junto a su equipo. En este lugar habría realizado algún tipo de pedido para él, su familia y compañía estadounidense.
Al año siguiente, el 30 de agosto de 1943, Walt Disney recibió la Orden del Águila Azteca, el mayor honor que otorga el Gobierno de México a un extranjero. El cineasta viajó a la Ciudad de México para recibir el galardón.