La pimienta es una de las especias más populares del mundo, es muy versátil y el ingrediente principal de distintas recetas. En el supermercado o tiendas es muy común encontrarla molida, pero muchos amantes de la gastronomía prefieren hacerlo segundos antes de cocinar y utilizan un molinillo, pero ¿qué pasa cuando este deja de moler? Para arreglar el problema no necesitas comprar uno nuevo, sino poner en práctica un pequeño tutorial para arreglarlo tú mismo. Desde Mag te explicamos los sencillos pasos para tener a punto este utensilio.
Como la mayoría de herramientas o utensilios dentro de la cocina, este también debe pasar por una revisión y mantenimiento constante para que agregar esta especia a tu plato no se convierta en un ‘dolor de cabeza’.
Ya sea de metal, cerámica, madera, acero, plástico o vidrio, el molinillo debe tener ciertos cuidados como no meterlo al lavavajillas; pasarle un trapo limpio y húmedo por las cuchillas periódicamente o si es de madera sécarlo muy bien y tenlo en un lugar sin humedad.
Cómo reparar un molinillo de pimienta
Ahora, si te preguntas por qué no funciona, deberás tomar en cuenta si es eléctrico o manual. Para la primera opción lo primero que debes hacer es revisar la batería, si el problema continúa es mejor llevarlo a un lugar donde reparen electrodomésticos. Si es manual, lo más seguro es que tenga algo atascado entre las cuchillas.
Para repararlo, un truco casero consiste en empapar un paño con algún aceite de cocina y limpiar lo más a fondo que puedas. También agregar sal gruesa y sacudir, pues tiene una consistencia diferente y podría mover las cuchillas de forma diferente para desatascarlo.
Si no te funcionó, entonces es hora de una reparación más profunda. Tendrás que desarmar el molinillo sacando la nuez metálica de la parte de arriba para abrir la cámara donde están los granos enteros de pimienta. Viértelos en un plato para ver si no están húmedos, pues este podría ser el problema. Si lo están, entonces mételos por algunos segundos en el microondas.
Ahora deberás voltear el molinillo y con un desarmador sacar los dos tornillos que sostienen el plato metálico que retiene la pimienta. Apalanca cualquier bloqueo en el mecanismo y verifica si no hay piezas rotas o dañadas.
Antes de volver a armarlo, limpia todas las piezas con un algodón empapado en alcohol y una vez seco, ensamblar todo el mecanismo. Para que giren mejor las cuchillas, puedes engrasarlas un poco y volver a rellenar con granos de pimienta secos.
Si tienes dificultad para volver a meter los granos, aquí te dejamos un truco casero para que no salgan rodando por toda la mesa de trabajo y por el suelo. Para introducirlos en la estrecha boca que está atravesada por la barra acero inoxidable, improvisa una especie de embudo con una servilleta de papel. También puedes usar una bolsa Ziploc o similar y hacer un corte en una de las puntas, como si fuera una manga pastelera.
¿Este truco casero te pareció interesante y aprendiste un poco más sobre la limpieza y el cuidado de tu hogar sin invertir mucho dinero? Como este ‘hack’, hay otro tipo de utilitarios que serán de tu agrado. Te invitamos a conocerlos y ponerlos en práctica. Para ello, solo tienes que entrar en el siguiente enlace para más trucos caseros en Mag, y listo. ¿Te animas?