En muchos hogares, las tazas no solo sirven para las bebidas calientes, sino también para disfrutar de infusiones frías. Y es que muchos tienen una que es su favorita y de la que no se separan por nada del mundo; sin embargo, por su uso diario tiende a cambiar de aspecto. ¿Quieres quitarle las manchas amarillas o marrones que dejó el té, ponche o café que te preparaste? Aplica estos trucos caseros para que tus ‘mugs’ luzcan relucientes. Así que toma nota y ponlo en práctica.
Esas manchas se forman por todas las bebidas que se sirven y, con el paso del tiempo, se vuelven desagradables y dan mal aspecto.
Es aquí donde los trucos caseros para lavar trastes llegan a solucionar el problema sin dañar su estructura y desprendiendo esa apariencia de suciedad para que las puedas seguir usando a diario.
Los trucos para quitar manchas en las tazas
Estos ingredientes caseros te serán de gran ayuda para la limpieza de tus mugs o tazas.
1. Bicarbonato de sodio
Este producto es muy habitual en trucos de limpieza.
- Lava la taza con el lavavajillas que siempre utilizas. Seca bien el recipiente.
- En un recipiente mezcla partes iguales de bicarbonato de sodio y agua. Después añade la misma cantidad de vinagre blanco y sal.
- Humedece las zonas manchadas de la taza y aplicar la pasta anterior. Utiliza un paño suave para frotar la superficie hasta que las marcas desaparezcan.
- Cuando las manchas de té o café ya no sean notorias, vuelve a lavar la taza para usarla.
2. Limón
El proceso es muy sencillo y eficaz.
- Frota el interior de la taza con el limón para impregnar las paredes con su jugo.
- Echa un poco de bicarbonato para crear una capa que cubra todo el interior.
- Déjalo seca por algunos minutos y retira con un paño ligeramente húmedo.
3. Vinagre blanco
Este truco es ideal para tazas de porcelana.
- Lo primero que hay que hacer para quitar manchas de café de una taza blanca es dejarla remojando con agua muy caliente y un chorro de vinagre blanco.
- También puedes añadir un chorrito de jabón líquido o detergente.
- Cuando el agua esté fría, lava la taza como normalmente lo harías. Frota con la esponja para trastes suavemente todo el interior y las paredes.
- Añade una cucharada de bicarbonato de sodio o de sal de grano y un poquito de jabón de trastes.
- Deja reposando al menos un par de horas y después lava para remover por completo la suciedad.
Cómo arreglar platos rayados y dejarlos como nuevos
1. Cremor tártaro
Este truco es poco conocido, pero muy efectivo.
- Se trata de una sal ácida que se emplea como agente estabilizador en la cocina, algunas recetas en repostería o en la industria del vino. Se puede encontrar en cualquier supermercado.
- Primero hay que limpiar bien el plato y secarlo para que no quede humedad
- El truco casero consiste en espolvorear una pizca de cremor tártaro sobre el plato rayado, sobre todo en las zonas más afectadas.
- Añade unas cucharadas de agua sobre el producto para formar una pasta, mezcla con los dedos para darle consistencia.
- Realiza movimientos circulares para que se impregne bien o puedes ayudarte de una esponja suave o una bayeta de cocina. Ve frotando hasta que desaparezcan las rayas.
- El último paso consiste en enjuagar el plato con agua y secarlo con un paño de cocina.