En tiempos difíciles como el que afronta el mundo debido a la COVID-19, en los que millones de personas perdieron sus empleos, la venta directa se convierte en una opción de negocio atractiva. Esta ofrece independencia económica a hombres y mujeres de cualquier edad. Todos pueden encontrar en este canal una forma de generar ingresos.
Actualmente más de 600 mil peruanos generan ingresos a través de la venta directa. “La cifra tiene tendencia a crecer, pues la industria está modernizándose y reinventándose para consolidar a este canal como una opción de emprendimiento atractiva”, asegura la presidenta de CAPEVEDI, Katherina Lozada.
En ese sentido, muchas de las empresas que pertenecen a la cámara se digitalizaron y adaptaron sus negocios a la llamada nueva normalidad, producto de la pandemia.
El auge del e-commerce
El comercio electrónico (e-commerce) es una alternativa ágil y moderna para los empresarios que son parte de la venta directa. Además, los refuerzos de las plataformas tecnológicas permiten que los consumidores tengan mayor confianza al adquirir productos, explica Lozada. “Hemos demostrado ser un canal resiliente, capaz de adaptarse a la era digital y a las exigencias sanitarias”, agrega.
Aumenta de demandas en 3 categorías
El universo de la venta directa es amplio y diverso. De acuerdo a CAPEVEDI, debido a la coyuntura, las áreas que incrementaron su demanda son: bienestar corporal, aseo y nutrición.