Semana Santa es la época en la que muchos se toman un merecido descanso y se proponen conocer ciudades de su país o irse al extranjero para disfrutar junto con la familia, pareja o amigos. Es aquí donde algunos eligen el avión para disminuir las horas de viaje o llegar a lugar más alejados sin pensar siempre en las consideraciones que se deben tomar para cuidar la salud ocular. ¿Sabías que debes evitar el uso de lentes de contacto? Aquí te explicamos el motivo.
Si bien estas lentillas tienen múltiples beneficios para quienes se animan a dejar de lado los lentes tradicionales, también requieren de muchos cuidados para evitar infecciones y usarlas correctamente.
Al momento de viajar muchos las prefieren porque permiten disfrutar del campo de visión en su totalidad, con una calidad perfecta, pero no todo es perfecto.
¿Qué pasa si uso lentes de contacto en el avión?
Si tu viaje es en avión, los expertos recomiendan no utilizar lentes de contacto durante las horas de vuelo, ¿por qué? El avión es un ambiente cerrado, por lo que el aire acondicionado circula continuamente, lo que causa una sensación de ojo seco. “En personas que sufren alergias o usan lentes de contacto, se hace más evidente la sequedad. Por eso, es importante que usen lubricantes oculares o eviten el uso de las lentillas”, explica el Dr. Gerardo Arana, especialista de Oftálmica Clínica de la Visión.
Debido a que el ambiente en cabina es muy seco, nuestros ojos podrían sufrir síntomas de incomodidad. Además, si durante el vuelo te quedas dormido, tus ojos se resecarán y necesitaras gotas humectantes.
Si aún así quieres utilizar tus lentes de contacto, es ideal que lleves en tu maleta de mano un kit que incluya un par de repuesto, líquidos de mantenimiento y tus gafas tradicionales).
¿Cómo cuidar la salud ocular en un viaje?
Es esencial ser precavido cuando se va a vacacionar. Ten a la mano un par adicional de gafas o lentes de contacto, en caso de emergencia; presta atención al clima del lugar que vas a visitar ya sea sol o nieve, porque será necesario tener gafas con filtros UV debido a que el reflejo puede causar sequedad y heridas oculares, ocasionando conjuntivitis o queratitis; no compartas prendas personales como lentes o toallas porque pueden ser fuente de contagio de enfermedades.
Asimismo, recuerda que, si sufres algún golpe en los ojos durante el viaje o presentas cambios en su visión (manchas flotantes, visión borrosa, destellos, etc.), debes acudir con un especialista lo antes posible.