El coronavirus es una pandemia que se ha expandido a más de 140 países y esto ha obligado a que las poblaciones se tengan que aislar para evitar que este virus siga avanzando. Esta situación ha hecho que millones de personas tengan dudas y miedos, entre los principales se encuentra la pregunta de muchos sobre las probabilidades de contraer el COVID-19 a través de los alimentos.
Ante este momento crítico que se está viviendo en el mundo, existen medidas muy sencillas que las personas deben de acatar para reducir su riesgo de infección. Las tres principales medidas son: lavarse las manos con agua y jabón frecuentemente, cubrirse la boca y la nariz con el pliegue del codo o pañuelo desechable a la hora de toser o estornudar, y evitar el contacto estrecho con personas que presenten síntomas gripales.
Por su parte, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos han sugerido que el virus puede mantenerse activo en algunas superficies, lo que podría generar contagio si la persona tiene contacto y luego se toca la boca, la nariz o los ojos. Pero, ¿es posible que el virus contamine los alimentos?
¿SE PUEDE CONTAGIAR EL CORONAVIRUS A TRAVÉS DE LOS ALIMENTOS?
Los especialistas han indicado que no existe evidencia que el COVID-19 se contagie a través de los alimentos, inclusive La Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) informó en un comunicado de prensa que no existen estudios que los alimentos sean una vía de contagio de coronavirus.
Algunos investigadores señalan que la posibilidad de contraer el virus a través de los alimentos es remota, sin embargo científicos no lo descartan en su totalidad. Lo que si se sabe con claridad es que el virus resulta muy poco resistente al calor, es por ello que procurar una cocción completa en los alimentos reduce significativamente el riesgo de contagio mediante la alimentación.
CONSEJOS PARA MANEJAR LOS ALIMENTOS CORRECTAMENTE
- Evitar el consumo de alimentos crudos sobretodo los de origen animal.
- Extremar las medidas de higiene alimentaria, procurando lavar y desinfectar a la perfección frutas y vegetales, refrigerar los alimentos, procurar correctas técnicas de descongelación y cocinar por completo las comidas.
- Una adecuada higiene de las manos previo a manipular los alimentos, es determinante en la reducción de riesgos.
- Desinfecta los utensilios y las superficies en las que vas a cocinar.
- Procura el uso de tapabocas y guantes para evitar riesgos si la persona que manipula los alimentos tose o estornuda.
ALIMENTOS QUE DEBES COMPRAR PARA MANTENERTE DURANTE LA CUARENTENA
- Cereales: harina, arroz, pasta, pan precocinado congelado o elaborado casero, cereales de desayuno enriquecidos en hierro y copos de avena, ambos sin azúcar añadido.
- Legumbres: garbanzos, lentejas, judías pintas y judías blancas, todos ellos frescos o en conserva, guisantes congelados o en conserva, quinoa fresca, edamames congelados.
- Verduras y hortalizas: en conservas o congelados como, por ejemplo, espinacas, acelgas, judías verdes, zanahorias, cardo, calabaza, menestra de verduras, patatas y tomate entero o triturado al natural; cebolla y cabezas de ajo crudos; purés de verduras envasados bajos en sal.
- Frutas y frutos secos: conservas al natural de piña y melocotón, fruta deshidratada o confitada, mermeladas, papillas de fruta y zumos sin azúcar añadido esterilizados; frutos secos naturales o ligeramente tostados, como nueces, almendras, avellanas o pistachos.
- Carnes y productos curados o en salazón: pata de jamón serrano o loncheado y envasado al vacío, cecina y lomo embuchado; ternera, pollo y cerdo para congelar en casa fileteados o troceados.
- Pescados y mariscos: salazones de bacalao y atún, conservas de pescado al natural o en aceite de oliva (sardinas, atún o ventresca), conservas de marisco al natural (almejas, mejillones o berberechos); alimentos perecederos como merluza, dorada o salmón para congelar en casa y aumentar su vida útil.
- Lácteos: leche en polvo, leche UHT, yogures esterilizados y quesos curados.
- Grasas, aceites y vinagres: aceite de oliva virgen extra, vinagres.
- Cafés, tés y especias: café, tés, infusiones, sal, azúcar moreno, especias, hierbas, condimentos, levadura.
- Dulces: chocolate negro, cacao puro sin azúcar añadido en polvo.
