Cuando Christy Staats visitó a un dermatólogo a raíz de una mancha roja debajo del ojo derecho, la mujer esperaba un sermón sobre el uso de protector solar o algún ‘tip’ para cuidar su piel, pero no un diagnóstico devastador. Esta es su historia.
La posibilidad de poder detectar un cáncer de piel en “Etapa I” significa una esperanza de vivir, siempre y cuando se lleve a cabo el tratamiento. Lo que nunca imaginó Christy Staats es que lo viviría en carne propia.
De acuerdo a Good Morning America, la mujer sacó cita con un dermatólogo hace dos años para que la examinaran una mancha diferente en la mejilla. Staats pensó que se trataba de algún lugar o lesión producto de los rayos solares.
Sin embargo, su mancha en su mejilla resultó ser un cáncer benigno en la piel, así lo dio a conocer su dermatólogo de cabecera, Alexander Witkowski, MD, Ph.D., profesor asistente de dermatología en la Facultad de Medicina de la Universidad de Ciencias y Salud de Oregón.
Witkowski primero examinó la mancha con un dermatoscopio, pero hubo otra que le llamó mucho la atención y que medía solo 0,025 pulgadas. Tenía el tamaño de la punta de una aguja y un pigmento ligeramente diferente al de un lunar normal.
Sus sospechas eran ciertas y finalmente el equipo en conjunto de la Universidad de Ciencias y Salud de Oregón confirmaron de que se trataba de un extraño y “más pequeño cáncer de piel” en la historia de la medicina.
Melanoma y Guinness World Records
Tras confirmarse que el lunar de Staats era un melanoma, Witkowski procedió a extirparlo antes de que se propagara. La semana pasada, Guinness World Records reconoció al médico y a su equipo de investigadores por descubrir la mancha de cáncer de piel más pequeña conocida.
“Queremos compartir este conocimiento con la próxima generación a medida que este ámbito de la atención médica comienza a cambiar, creo que en el buen sentido”, dijo Witkowski, de 36 años, a The Washington Post.
Lunares cancerosos
Witkowski indicó que algunos lunares cancerosos de menos de 5 milímetros de diámetro, por lo general, pasan desapercibidos. Asimismo, indicó que habitualmente ve lesiones de aproximadamente un milímetro de tamaño, pero el lunar de Staats apenas se notaba.
“Pensarás que estoy loco, pero creo que este es el cáncer de piel más pequeño hasta la fecha”, fueron las palabras que le dijo a Staats al encontrar células cancerosas brillantes y reflectantes en el supuesto ‘lunar’.