El diseñador y arquitecto estadounidense, Doug Aitken, diseñó una casa que ha sido cubierta totalmente de espejos. Ubicada en las alturas de los alpes suizos, la Mirage Gstaad tiene como objetivo reflejar las estaciones y “camuflarse” entre los rayos del sol, la frondosa vegetación del lugar y, por supuesto, las fuertes nevadas.
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Como era de esperarse, el lugar se ha convertido en una atracción para lugareños y turistas que llegan al sitio para tomarse una foto con la Mirage Gstaad de fondo. En redes sociales, es posible hallar videos y fotografías de esta vivienda que está captando la atención de mucha gente.
Sin embargo, la construcción ha recibido críticas por parte de algunos especialistas que aseguran que su aspecto “invisible” puede convertirse en un problema para la vida salvaje. Explican que las paredes reflectantes del Mirage Gstaad pueden no ser vistas por algunas aves, lo que supondría una “trampa mortal” para los especímenes que vuelan a una gran velocidad.
Aitken se defendió diciendo que ya habían implementado medidas para hacer que el edificio sea visible para los animales; no obstante, sus explicaciones no convencieron a la mayoría críticos.
