Secuestró a su esposa y la mató enterrándola viva, ahora irá a la cárcel de por vida

David Pagniano, un hombre de Arizona, Estados Unidos, ha sido sentenciado a cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional por la muerte de su esposa, quien fue enterrada viva en una fosa cavada a mano cerca de su vivienda, informaron autoridades.

Pagniano decidió declararse culpable antes del inicio del juicio y le permitió al juez dictar sentencia sin llegar a ningún acuerdo con la fiscalía.

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David Pagniano, de 62 años, también fue sentenciado el 9 de mayo a 16 años y medio de prisión por secuestro, falsificación de documentos y fraude, según la fiscalía del condado Yavapai.

“Mi despacho pidió la pena de muerte en este caso debido a las circunstancias horribles en torno al secuestro y asesinato de una joven madre”, dijo el fiscal Dennis McGrane en un comunicado.

Según el caso, Sandra Pagniano, de 39 años, desapareció cuando estaba en proceso de divorciarse de su esposo en mayo de 2017. Estaban separados pero vivían en la misma casa con sus dos hijas pequeñas.

El cadáver de Sandra Pagniano fue hallado amordazado y maniatado, envuelto en cinta adhesiva, en una fosa en una zona rural al norte de Prescott, y el forense confirmó que había sido enterrada viva.

La policía dice que la evidencia demuestra que Sandra Pagniano trató desesperadamente de salvarse cuando estaba enterrada, y posiblemente estuvo consciente hasta cinco minutos.

Dicen que señales de teléfono celular muestran que David Pagniano estaba en la zona de la fosa días antes de la desaparición de su esposa y en la noche del secuestro.

Los detectives descubrieron dos notas introducidas en el caso por divorcio tras la desaparición de Sandra Pagniano, supuestamente escritas por ella.

Las notas dicen que ella estaba abandonando a David Pagniano y dejándole sus vehículos, la casa y la custodia de sus hijas.

Pero las autoridades dicen que un examen forense de las notas reveló que fueron escritas por David Pagniano.

Un jurado investigador le imputó un cargo de homicidio intencional una vez fue descubierto el cuerpo de la mujer, en una zona rural a 16 kilómetros (10 millas) al noroeste de la vivienda de la pareja cerca de Prescott en el centro-norte de Arizona.