El acuerdo por el que EE.UU. pagará 100 millones de dólares a las víctimas de Larry Nassar por los fracasos del FBI

El caso Larry Nassar, el exmédico del equipo nacional de gimnasia femenina de Estados Unidos condenado a décadas de prisión por abusos sexuales, tiene un nuevo capítulo. Este miércoles se conoció que el Departamento de Justicia acordó pagar unos 100 millones de dólares a 100 de las víctimas. Ello debido a que en su momento el FBI no tomó en serio las denuncias que le presentaron sobre la conducta delictiva del doctor, algo que le permitió seguir abusando.

De acuerdo con The Wall Street Journal, el primer medio que informó del acuerdo, lo pactado resolverá uno de los últimos reclamos legales contra las instituciones que fallaron en sus respuestas a las denuncias contra Nassar. De esta manera, el total de las indemnizaciones acordadas hasta la fecha se acerca a los 1.000 millones de dólares.

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En junio del 2022, unas 100 mujeres solicitaron de manera colectiva más de 1.000 millones de dólares al Gobierno federal por la incapacidad del FBI para detener a Nassar. Entre las demandantes figuran las medallistas de oro olímpicas Simone Biles, Aly Raisman y McKayla Maroney.

En el 2018, la Universidad Estatal de Michigan, donde trabajó Nassar, acordó pagar 500 millones de dólares a las mujeres y niñas que afirmaron que fueron agredidas por el médico. Mientras que en el 2021, USA Gymnastics y el Comité Olímpico y Paralímpico de Estados Unidos llegaron a un acuerdo de 380 millones de dólares con las víctimas.

El Journal indicó que el acuerdo con el Departamento de Justicia fue alcanzado hace varios meses y en principio fue aceptado por las víctimas de Nassar, pero no ha sido finalizado.

Como anota la prensa de Estados Unidos, las víctimas de casos como el de Nassar pueden exigir compensaciones en virtud de la Ley Federal de Reclamaciones por Agravios, que permite a las personas demandar al gobierno de Estados Unidos por negligencia.

Larry Nassar trabajó durante casi tres décadas con el equipo de gimnasia de Estados Unidos, USA Gymnastics, y tuvo una clínica Universidad Estatal de Michigan (MSU).

Según ABC News, el Departamento de Justicia encontró que el FBI no actuó de manera correcta cuando algunas de las atletas denunciaron a Nassar.

En julio del 2015, USA Gymnastics acusó por primera vez a Nassar ante la oficina del FBI en Indianápolis. Pero la investigación de la agencia fue tan lenta y negligente que recién septiembre del 2016 registró la casa del médico.

La inacción permitió a Nassar continuar agrediendo sexualmente a decenas de víctimas.

En julio del 2021, el máximo organismo de control del Departamento de Justicia publicó un informe en el que afirmaba que la oficina del FBI en Indianápolis cometió “errores fundamentales” y no notificó a otras oficinas del FBI ni a las autoridades estatales o locales sobre el caso de Nassar.

En ese informe, Michael Horowitz, inspector general del Departamento de Justicia, acusaba a un agente especial a cargo de la oficina de campo de Indianápolis de dar instrucciones al FBI para que emitiera una declaración falsa a los medios de comunicación a principios del 2017, en la que decía que su oficina había “respondido rápidamente” a las acusaciones contra Nassar.

En setiembre del 2021, ante un comité del Senado, el director del FBI, Christopher Wray, reconoció las fallas del organismo. Dijo que eran “imperdonables”.

“Lamento especialmente que hubo personas en el FBI que tuvieron la oportunidad de detener a este monstruo en 2015 y fracasaron”, manifestó Wray dirigiéndose a las víctimas presentes en el Senado.

En el 2014, Amanda Thomashow se convirtió en la primera mujer en presentar una queja oficial contra Larry Nassar. Dijo a la policía de la Universidad Estatal de Michigan (MSU) que él la había tocado de manera inapropiada durante un examen médico y que ella consideraba que en realidad se había tratado de un abuso sexual. Pero la universidad se puso del lado del doctor y su investigación concluyó que su comportamiento había sido “médicamente apropiado”. No presentó cargos en su contra. Nassar siguió abusando de sus pacientes.

En julio del 2015 comenzó la negligente investigación del FBI sobre Nassar después de que el presidente y director general de USA Gymnastics, Stephen Penny, informara a la oficina de campo del FBI en Indianápolis de las acusaciones hechas por Maggie Nichols contra el médico y proporcionara a los agentes los nombres de tres víctimas dispuestas a ser entrevistadas.

Tras esa denuncia, Nassar ya no podía tratar pacientes en el equipo de gimnasia de Estados Unidos, pero continuó abusando niñas en el estado de Michigan, pues la investigación del FBI no avanzaba.

El 4 de agosto del 2016, el “Indianapolis Star” publicó el primero de una serie de informes de investigación sobre la conducta de Nassar. En los reportajes figuraban las denunciantes Rachael Denhollander y otra gimnasta olímpica que no quiso que se revelara su nombre (más tarde se supo que era Jamie Dantzscher, miembro del equipo olímpico de Estados Unidos en Sídney 2000). Después de las primeras historias, más de 50 mujeres reportaron casos similares de abuso sexual por parte del médico.

Finalmente, Nassar fue arrestado por el FBI en noviembre del 2016.

El 22 de noviembre de ese año, fue acusado de tres cargos de conducta sexual criminal en primer grado en el condado de Ingham, Michigan, incluyendo uno con una persona menor de 13 años. Se declaró inocente y fue liberado con una fianza de un millón de dólares.

El fiscal general del estado dijo que el asunto era “solo la punta del iceberg” y la policía reveló que 50 víctimas habían hecho denuncias de abuso sexual contra él.

En diciembre del 2017, Nassar se declaró culpable de cargos federales de pornografía infantil y fue sentenciado a 60 años en prisión.

Además, en enero del 2018 se declaró culpable de siete cargos de conducta sexual criminal en el condado de Michigan y fue sentenciado a entre 40 y 175 años de prisión. En este caso, un total 265 pacientes dijeron haber sido atacadas.

Luego, en febrero del 2018, Nassar fue sentenciado a entre 40 y 125 años de prisión después de declararse culpable de tres cargos de conducta sexual criminal en el condado de Eaton, Michigan.