Rusia vuelve a atacar infraestructura portuaria en el mar Negro

Rusia lanzó el martes ataques aéreos contra las regiones ucranianas de Odessa y Mykolaiv, en el mar Negro, impactando edificios privados e infraestructura portuaria con misiles lanzados desde bombarderos de largo alcance, informó el ejército ucraniano.

En la región de Odessa, varios edificios civiles de localidades costeras fueron alcanzados y se incendiaron, informó el Mando Operativo del Sur en una publicación de Facebook.

Un portavoz de la fuerza aérea ucraniana dijo que bombarderos rusos de largo alcance Tu-22M3 y cazas Su-30 y Su-35 lanzaron los ataques desde el mar Negro. En la región de Mykolaiv, la infraestructura portuaria fue objeto de ataques a pesar de los acuerdos destinados a permitir la reanudación de los envíos de grano desde los puertos ucranianos en el mar Negro.

Horas después de los ataques, un funcionario designado por Moscú para el sur de Ucrania dijo que las fuerzas rusas pronto liberarían a las regiones de Odessa y Mykolaiv, como ocurrió con Jersón, más al este.

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“La región de Jersón y la ciudad de Jersón han sido liberadas para siempre”, afirmó Kirill Stremousov según declaraciones publicadas por la agencia noticiosa estatal rusa RIA Novosti.

En el frente diplomático, el ministro de Asuntos Exteriores de Rusia repitió su insistencia de que Moscú está dispuesto a mantener conversaciones con Ucrania para poner fin a la guerra, aunque afirmó nuevamente que los aliados occidentales de Kiev se oponen a un acuerdo.

“Nunca nos hemos negado a mantener conversaciones, porque todo el mundo sabe que cualquier hostilidad termina en la mesa de negociaciones”, señaló el martes el ministro de Asuntos Exteriores ruso, Sergey Lavrov, durante un viaje a Uganda.

Dijo que las negociaciones no han avanzado desde que ambas partes se reunieron en Estambul a finales de marzo.

Aunque los funcionarios ucranianos han hablado de una posible contraofensiva en el sur, el Ministerio de Defensa británico informó el martes que no había indicios de que hubiera un buque de guerra ucraniano y un arsenal de misiles antibuque en el puerto de Odessa, como afirmó Moscú cuando atacó el lugar el fin de semana.

El ministerio británico señaló que el Kremlin considera que el uso de misiles antibuque por parte de Ucrania es una “una amenaza clave” que limita su flota en el mar Negro.

“Esto ha socavado significativamente su plan general de invasión, ya que Rusia no puede intentar, de forma realista, un asalto anfibio para tomar Odessa”, indicó el ejército británico. “Rusia seguirá priorizando los esfuerzos para degradar y destruir las capacidades antibuques de Ucrania”.

“Es muy probable que los procesos de selección de objetivos de Rusia se vean socavados de forma rutinaria por una inteligencia anticuada, una mala planificación y el enfoque de sus operaciones”, agregó.

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En otros acontecimientos militares, ataques rusos en las últimas 24 horas cobraron la vida de por lo menos tres civiles e hirieron a ocho en Ucrania, según informó el martes la oficina del presidente ucraniano.

En la región oriental de Donetsk, donde se han concentrado los combates en las últimas semanas, los ataques continuaron a lo largo del frente y sus ciudades más importantes, incluyendo Bakhmut, Avdiivka y Toretsk, indicó un comunicado la oficina presidencial.

El gobernador regional, Pavlo Kyrylenko, acusó a las tropas rusas de emplear municiones de racimo y reiteró su llamado a la población civil para que abandone la zona.

“Ya no hay ningún lugar que sea seguro, todo está siendo atacado”, señaló Kyrylenko en declaraciones televisadas. “Pero sigue habiendo rutas de evacuación para la población civil”.

El Instituto para el Estudio de la Guerra, con sede en Washington, D.C., reportó que Rusia utilizaba mercenarios del Grupo Wagner para capturar la planta eléctrica de Vuhledar, a las afueras de la localidad de Novoluhanske.

Pero las fuerzas rusas han realizado “avances limitados” en esa zona, según el Estado Mayor ucraniano.

El principal objetivo de los rusos ha sido la captura de Bakhmut, que el ejército ruso necesita para presionar su ofensiva oriental sobre los bastiones ucranianos en Donetsk, las ciudades de Sloviansk y Kramatorsk.

“Las fuerzas rusas han logrado avances marginales al sur de Bakhmut, pero es poco probable que puedan sacar provecho de esos avances para tomar control absoluto de Bakhmut”, agregó el Instituto para el Estudio de la Guerra.

Las fuerzas rusas continuaron sus ataques contra infraestructura civil en Járkiv, la segunda ciudad más poblada de Ucrania, y contra la región circundante en el noreste del país.

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El gobernador de Járkiv Oleh Syniehubov dijo que los ataques contra la ciudad se reanudaron la madrugada del martes y dañaron un concesionario de automóviles.

“Los rusos atacan deliberadamente infraestructura civil: hospitales, escuelas, cines”, comentó Syniehubov a la televisora ucraniana. “Disparan contra todo, incluso contra las filas para recibir ayuda humanitaria, por lo que pedimos a la gente que evite las concentraciones masivas”.

En tanto, el Ministerio de Asuntos Exteriores de Moldavia informó el martes que un ciudadano moldavo murió y otro resultó herido en lo que, según dijo, fue un ataque ucraniano en la frontera de Rusia con Ucrania. El informe no confirmado dijo que el ataque se produjo en un puesto de control fronterizo en la región rusa de Bryansk.