Este modismo familiar del Perú y otros países de la América hispana significa ‘tener una cortísima siesta’. Se documenta en un texto de Bayly, muestra de su desenfadado estilo: “… mujer, por qué chucha me despiertas cuando estoy echando una pestaña” (Los últimos días de La Prensa, Barcelona 1996, p. 352). Equivalente de pestaña, con este sentido, es el derivado pestañada, variante americana de la forma general pestañeo.