Con casi total adaptación fonética al castellano peruano se pronuncia esta marca comercial original (Therma) de un calentador eléctrico de agua, usado generalmente para la higiene personal (hoy existen modernas termas a combustión de gas). En el n.° 1616 de la revista limeña Caretas, Rafo León pone en boca de la China Tudela estas graciosas palabras referidas a cierto personaje: “… te lo juro que lo vi gordo como una terma de hotel…”.