Tres policías fueron secuestrados por unas horas y despojados de sus armas de reglamento por parte de organizaciones criminales que operan en la zona de la Pampa, en el kilómetro 108, cuando retornaban de un operativo contra la trata de personas. El hecho ocurrió en el viernes 16 de julio, según un documento policial al que este Diario tuvo acceso.
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Todo empezó después de una denuncia de trata de personas, prostitución y otros delitos en agravio de una menor de dieciséis años. Fue así que cinco policías de la Divincri de Puerto Maldonado, a bordo de un vehículo de la Policía Nacional, se dirigieron al distrito de Boca Colorado.
Luego, camino de regreso, se produjeron los hechos. En diálogo con El Comercio, el jefe del Área de Investigación contra la Trata de Personas y Tráfico ilícito de Migrantes y Desaparición de Personas (AREINTRAMP) de la Divincri, el suboficial brigadier PNP Marco Antonio Rojas Huamán -quien también viajaba en el vehículo policial-, relató que al pasar por la zona de la Pampa del día mencionado, a eso de la 11 de la noche, tres suboficiales bajaron de la unidad y se fueron a comprar alimentos y agua. Luego, en momentos en que ingresaban a la zona conocida como el “Faraón”, fueron sorprendidos por un grupo de 15 personas, todos con armas de fuego, quienes los agredieron físicamente y les arrebatan sus armas de reglamento.
Según narró Rojas Huamán, al darse cuenta del ataque a sus compañeros, “por un momento, temí lo peor y busqué apoyo en la base Charly para rescatar a los suboficiales que habían sido secuestrados, y para la recuperar las armas”. Pero, según refiere, no encontró apoyo.
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La base Charly es una base policial de alta movilidad conjunta, ubicada en el kilómetro 108 de la vía Interoceánica, en la zona de minería ilegal de la Pampa. Esta fue instalada por el operativo Mercurio 2019 para la erradicación de la minería ilegal y el control de la zona, para impedir el retorno de los mineros al lugar.
Los suboficiales secuestrados por los delincuentes fueron Roque Rolando Chalco Ccotohuanca (S2), Henry Daniel Portocarrero Chávez (S2) y Urbano Guillen Quispe (S3).
Llamada de auxilio
Horas después, en la madrugada del sábado, Rojas Huamán recibió una llamada en su celular. Era uno de sus compañeros quien le indicaba que habían sido abandonados en una chacra, a la altura del kilómetro 115 de la vía Interoceánica. Fue así que, luego de unas coordinaciones, los tres suboficiales fueron rescatados en el mismo vehículo policial en que se trasladaban y luego llevados al Hospital Santa Rosa de la ciudad Puerto Maldonado para la atención médica.
También se enteró que los suboficiales, una vez secuestrados por los delincuentes, fueron trasladados fuera de la zona de la Pampa en dos motocargueras, las cuales estaban custodiadas por cinco motocicletas. Asimismo, supo que fueron interrogados y golpeados en el lugar donde fueron abandonados.
Ese mismo sábado, el jefe de la región policial de Madre de Dios, coronel Jorge Aldo Barrera Cueva, dio órdenes y disposiciones para que el personal policial extreme las medidas de seguridad en las instalaciones policiales, armamentos, documentación, informaciones, vehículos, servicios, etc. Además, se desplegó más de 100 efectivos policiales pertenecientes a las diversas unidades hacia la zona de la Pampa para la búsqueda y ubicación de los delincuentes, la recuperación de las armas y proteger al personal policial, pero los resultados fueron negativos.
Al cierre de esta nota, aún en la región policial no hay información sobre los responsables de haber secuestrado y golpeado a los policías, asimismo de haberles arrebatado sus armas. Las investigaciones se vienen desarrollando en la Divincri de Puerto Maldonado.
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