(AP). Los médicos en Estados Unidos han detectado un aumento en las alergias repentinas a la carne entre la gente que es mordida por un cierto tipo de garrapata.
El inusual problema fue descubierto hace pocos años, pero va en aumento a medida que estos ácaros se propagan del suroeste hacia el este y otras partes de Estados Unidos. En algunos casos, comerse una hamburguesa o un bistec ha mandado a personas al hospital con graves reacciones alérgicas.
La doctora Erin McGintee, una especialista en alergias del este de Long Island, una zona con muchas garrapatas, ha visto casi 200 casos en los tres últimos años, al menos 30 eran niños. “Es raro”, señaló. “Es diferente a casi todo lo que he aprendido como una alergista”, porque los síntomas pueden ocurrir hasta ocho horas después de comer la carne, en vez de inmediato, y la culpable es la azúcar, un tipo de carbohidrato, mientras que la mayoría de las alergias de comida son ocasionadas por proteínas, explicó.
La culpable es la garrapata Lone Star, nombrada así por el apodo que recibe Texas, un estado famoso por sus asados. La garrapata ahora se encuentra en todo el sur y el este de Estados Unidos.
La explicación es la siguiente: el insecto tiene un azúcar que los humanos no poseen, llamado alfa-gal. Esa azúcar también se encuentra en la carne roja, res, cerdo, venado y conejo; e incluso en algunos productos lácteos.
Pero una mordedura de la garrapata ocasiona una respuesta del sistema inmunológico, y ese estado de alerta, el cuerpo considera la azúcar que la garrapata transmitió a la piel como una sustancia extraña, y produce anticuerpos para combatirla. Eso puede provocar una reacción alérgica la próxima vez que la persona coma carne roja y la azúcar entre a su cuerpo.