SpaceX recibió la autorización de la Comisión Federal de Comunicaciones de Estados Unidos (FCC) a usar su red de Internet satelital Starlink para ofrecer su Internet en los vehículos que estén en movimiento, por ejemplo, los autos, trenes, aviones, barcos y camiones.
Llevar el Internet satelital a un avión o tren facilitará el aumento de velocidad de la conexión en pleno trayecto, mejorando este servicio que suele ser precario en la mayoría de transportes. Otras empresas similares como la canadiense Kepler Communications avanza en la misma dirección.
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“La autorización de una nueva clase de terminales para el sistema satelital de SpaceX ampliará la gama de capacidades de banda ancha para satisfacer las crecientes demandas de los usuarios que ahora requieren conectividad mientras se desplazan”, dijo la FCC en su autorización publicada la semana pasada, haciéndose eco de los planes descritos en la solicitud de SpaceX de la aprobación a principios del año pasado.
Desde 2019, la compañía que dirige Musk ha lanzado unos 2.700 satélites a la órbita terrestre y ha acumulado cientos de miles de sunoscriptores, incluidos muchos que pagan USD$ 110 al mes por Internet de banda ancha usando kits de equipos autoinstalables de USD$ 599.
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Space X ha puesto gran parte de sus esfuerzos estos últimos años en cortejar a las aerolíneas para que ofrezcan WiFi de Starlink a sus pasajeros en pleno vuelo, habiendo firmado sus primeros acuerdos de este tipo en los últimos meses con Hawaiian Airlines y el servicio de jet semiprivado JSX.
“Estamos obsesionados con la experiencia del pasajero”, dijo Jonathan Hofeller, jefe de ventas comerciales de Starlink, en una conferencia de aviación a principios de este mes. “Vamos a estar en aviones aquí muy pronto, así que esperamos que los pasajeros queden impresionados con la experiencia”.
A pesar de que SpaceX promete una velocidad de conexión de entre 100 y 200 megas por segundo, aún se desconoce cómo se instalará dicho servicio en los vehículos. Para ofrecer Internet es necesario instaurar una antena, por consiguiente, queda por ver cómo se implementaría la medida.
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