“Debemos valorar que tenemos un continente de paz”

Walker San Miguel
Secretario general de la Comunidad Andina

Nací hace 53 años en La Paz. Estudié derecho en la Universidad de San Andrés. Fui presidente del Colegio de Abogados de La Paz. Fui ministro de Defensa y cónsul general de Bolivia en Chile. Vivo en Lima desde enero, cuando asumí la secretaría.

Por: Renzo Giner Vásquez (@SebGiner)

En el 2014, el Perú ratificó el Protocolo de Nagoya, el cual busca contribuir con la conservación de la diversidad biológica e impulsar el biocomercio en la región.

—En el 2010, la ONU decretó como la década de la diversidad biológica el período entre el 2011 y el 2020…
Exactamente. La ONU nos ha pedido ser sede de un conversatorio sobre biocomercio. Estarán autoridades de Colombia, Brasil y el Perú, así como expertos de la cooperación sueca y de Naciones Unidas. Tratarán temas de cadenas de valor, biocomercio y bionegocios en Latinoamérica, con énfasis en el área andina. Para nosotros es una tarea encomiable. Si algo de potencial tenemos los países andinos es la biodiversidad, que ha permitido el ‘boom’ de la quinua y del aguaymanto en el Perú y Bolivia, o el café orgánico en Colombia y Ecuador. Como conclusión se entregará una plataforma virtual para la gestión de solicitudes de acceso al comercio en el Perú.

—La meta es que el ‘boom’ beneficie a todos los actores, ¿cómo lo maneja la Comunidad Andina [CAN]?
Nos hemos enfocado más en las tareas de comercio en general, sanidad animal y sanidad vegetal. Para nosotros es importante que el comercio de animales y vegetales tenga facilidades y se superen las trabas aduaneras y fitosanitarias. Considero que hemos sido medianamente exitosos, el desafío es hacia afuera: potenciar aún más nuestras cadenas de valor para exportar a mercados como Asia, EE.UU. o Europa.

—Ocupa este cargo desde hace ocho meses. ¿Cuál ha sido el mayor desafío?
Reactivar la CAN y la secretaría en general de cara al interés que tienen los estados miembros y asociados para materializar muchas de las tareas pendientes de integración andina y sudamericana en general. En años pasados ha habido cuestionamientos a la labor de la secretaría, pero quizá lo que ha faltado es mayor información y visibilización de lo que la institución realiza. Me ha tocado una etapa interesante, en la que uno puede aportar lo que conoce, pero también aprender muchísimo.

—¿Y el mayor reto como ministro de Defensa en su país?
Fue ver si las FF.AA. acompañarían a un gobierno denominado de izquierda. En Bolivia era muy común que las FF.AA. no permitieran que la izquierda se instalase. Pero el gobierno de Evo Morales lo logró, aglutinando a las mayorías indígenas que estaban excluidas del sistema político. Así que el reto fue llevado bastante bien.

—Una de las cosas que más nos falta en la región es integración. ¿Por qué nos cuesta tanto?
Creo que ha faltado una visión de la capacidad del mundo indígena. Ha habido mucha denostación de lo que hacían los indígenas e intereses de ciertas élites que evitaban su ingreso. Bolivia es un caso particular porque el mundo indígena entró al mercado y generó una gran autoestima. Ecuador ha ido en ese camino; Colombia y el Perú han revalorizado tremendamente a los indígenas en la vida social. Obviamente falta mucho por hacer, pero estamos en camino.

—Tras su paso por el ministerio fue cónsul en Chile…
Así es. Destaco siempre esa experiencia porque hubo un intenso diálogo bilateral.

—Un diálogo que ahora está deteriorado.
Sí, por temas históricos no resueltos; está la demanda de La Haya. Pero creo que al final del camino se impondrá el diálogo. Yo repasaba la historia de la CAN y hay momentos en los que Ecuador y el Perú atravesaron momentos difíciles, incluso con aprestos bélicos, y se reunieron acá para resolver esos temas y lo lograron. Espero que mi país también lo resuelva mediante el diálogo.

—¿Es la mayor preocupación para Bolivia?
Está instalada con mucha fuerza en la agenda internacional de Bolivia. Pero es bueno destacar que acudir a La Haya es una solución pacífica, como en una oportunidad sucedió con el Perú y Chile. Creo que debemos valorar que tenemos un continente de paz, lo estamos acariciando ahora con Colombia. Estos signos nos deben alentar en el sentido de que podemos resolver los problemas por la vía del diálogo.