(Foto: Reuters)
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Juan  Saldarriaga

Congo reemplazará irremediablemente al Perú como segundo productor mundial de cobre desde el año 2026 como consecuencia de la paralización de muchos proyectos cupríferos “los cuales tienen los permisos parados”.

Así lo indicó ayer Rubén Arratia, director de investigación para metales base y metales preciosos de Wood Mackenzie.

En conversación con este Diario, el analista se reafirmó en su estimación de que Congo, con sus megaproyectos Tenke Fungureme y Kamoa-Kakula, y “otros proyectos con leyes altísimas de cobre”, pasará al Perú como segundo productor.

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Perú llegará a su pico de producción de cobre en el 2024 con 2,9 millones de toneladas, pero después de eso su producción comenzará a bajar y Congo lo superará”, dijo.

No obstante, Arratia remarcó que Perú puede retomar su segunda posición porque tiene la ventaja de ser un país relativamente joven en términos de oportunidades de exploración.

Explicó que para ello tiene que sacar adelante sus grandes proyectos, como Tía María y otros proyectos en Cajamarca, los cuales están paralizados mientras el hambre cunde en el país y la población tiene necesidad de empleo.

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El analista saludó el destrabe de nueve proyectos mineros anunciado por el Gobierno pero precisó que no será suficiente para revertir el declive de producción cuprífera del país porque “la mayoría son proyectos pequeños y muchos de ellos no son de cobre”.

Por eso instó al primer ministro y a los gobernadores regionales a sacar adelante los proyectos más grandes, que “son los que más benefician al país y ahora están parados”.

Las máximas autoridades políticas son las que tienen que mojarse para sacar adelante los proyectos”, expresó.

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