Distintos rostros, pero más de una cosa en común. El gobierno de la presidenta Dina Boluarte llegó ayer a los 497 días de gestión, la misma cantidad que alcanzó su antecesor Pedro Castillo en el poder, desde su toma de mando, en julio del 2021, tras ganar los comicios; hasta su caída, en diciembre del 2022, tras un fallido golpe de Estado. Y, a pesar de los intentos de diferenciarse la primera del último, la inestabilidad y la falta de transparencia, entre otros, son los factores que más han caracterizado a las dos administraciones.