Es pequeño, patagónico y nuevo para la ciencia. Pertenece al género Tympanoctomys, y su pariente más cercano es conocido vulgarmente como rata vizcacha, Tympanoctomys barrerae, que habita en el centro de Argentina.

Pero el nuevo roedor, hallado en la provincia de Chubut, llevará el nombre de T. kirchnerorum, en honor a los presidentes Néstor Kirchner y Cristina Fernández de Kirchner.

Así lo anunciaron Pablo Teta y Ulyses Pardiñas, del Centro Nacional Patagónico (Cenpat-CONICET), dos de los autores del estudio que describe al animal y que publicará en febrero de 2014 la revista especializada Journal of Mammalogy.

Es el primer mamífero nuevo que la ciencia identifica en 50 años en la Patagonia árida, una región que comprende 700 kilómetros cuadrados. Adaptado a vivir en zonas desérticas, T. kirchnerorum puede comer plantas con alto componente salino.

Otra de sus peculiaridades, según explica a BBC Mundo Ulyses Pardiñas, es que se trata de una especie tetraploide, lo que significa que tiene cuatro juegos de cromosomas.

Esto, que tiene que ver con el desarrollo de estrategias adaptativas, es algo común en las plantas pero muy raro en los mamíferos, dicen los científicos.

HOMENAJE TAXONÓMICO El nombre elegido para el roedor patagónico alude a Cristina y Néstor Kirchner, la presidenta argentina y su fallecido esposo, que también fue presidente entre 2003 y 2007.

Y la intención, dice Pardiñas en diálogo con BBC Mundo, es reconocer el cambio brutal que han hecho en el campo de la ciencia y la técnica, destinando recursos que permitieron después de muchos años dar continuidad a muchos proyectos de investigación.

Es normal, dice el científico, utilizar la taxonomía para homenajear a distintas personalidades. El año pasado se le dedicó un pajarito a Obama, cita como ejemplo de homenaje taxonómico.

Sin embargo, aunque recién nombrado y descrito, el destino de T. kirchnerorum no parece muy promisorio. Los investigadores encontraron varias poblaciones fósiles de este roedor, pero una sola viva.

Según se desprende de su estudio, la nueva especie podría enfrentar un grave riesgo de extinción. La ganadería ovina y los proyectos de minería de uranio pueden suponer una amenaza para su hábitat.