Bajo el parque nacional de Yellowstone, en el oeste de Estados Unidos, yace un coloso dormido de 90 kilómetros que contiene entre 200 y 600 kilómetros cúbicos de roca fundida.
Y estas cifras sugieren que este supervolcán es 250% más grande de lo que se pensaba, según las conclusiones de un estudio presentado en la reunión anual de la Unión de Geofísicos de EE.UU. (AGU, por sus siglas en inglés) que se realiza en San Francisco.
Hemos estado trabajando allí durante mucho tiempo y siempre pensamos que podía ser más grande, dice Bob Smith, uno de los investigadores de la Universidad de Utah responsables del estudio.
Pero este hallazgo es asombroso, agrega.
No parece que vaya a ocurrir pronto, pero si semejante volcán estallara, las consecuencias serían catastróficas.
Su última gran erupción, que se calcula ocurrió hace 640.000 años, lanzó cenizas sobre toda América del Norte y afectó el clima del planeta.
Ahora los científicos creen que tienen una idea más completa de lo que yace bajo el suelo de Yellowstone.
ONDAS SÍSMICAS Para su estudio, los investigadores utilizaron una red de sismómetros ubicados alrededor del parque para mapear la cámara de magma.
Registramos sismos dentro y alrededor de Yellowstone y medimos las ondas sísmicas en su camino a través del suelo, explicó Jamie Farrell, también investigador de la Universidad de Utah.
Las ondas viajan más despacio cuando atraviesan material caliente y parcialmente fundido, y así podemos medir lo que hay debajo.
Según lo observado por el equipo de científicos, la caverna de magma es colosal: alcanza profundidades de entre 2km y 15km, y mide alrededor de 90km de largo y 30km de ancho.
Se extiende aún más hacia el noreste del parque de lo que otros estudios habían sugerido, y contiene una mezcla de roca sólida y fundida.
Hasta donde sabemos nunca se había mapeado algo de este tamaño, agregó Farrell.
Con estos hallazgos, los investigadores pueden evaluar mejor la amenaza que representa el inestable gigante.
Es un sistema mucho más grande, pero no creo que haga que la amenaza de Yellowstone sea peor, explicó Smith.
Sí nos da más información sobre el área que se encuentra al noreste de la caldera, indicó.
A LA ESPERA DE LA IRA SUPERVOLCÁNICA Smith dice que los científicos no saben cuándo volverá a erupcionar el volcán.
Algunos creen que una erupción masiva está en camino –o incluso que ya está llegando con retraso– al estimar que el volcán de Yellewstone estalla cada 700.000 años, aproximadamente.
Pero Smith dice que hace falta más información, porque hasta ahora sólo hubo tres grandes erupciones: hace 2,1 millones de años, hace 1,3 millones de años y hace 640.000 de años.
Sólo puedes tomar en cuenta el tiempo entre las erupciones (para calcular la frecuencia), así que sólo tienes dos números para llegar a esa figura de 700.000 años, explicó.
No mucha gente compraría algo en la bolsa de valores basándose en dos días de datos de mercado, comparó el experto.
En otro estudio presentado en la reunión anual de la AGU, los científicos han estado investigando otras erupciones volcánicas más antiguas que ocurrieron en la misma franja de la placa continental en la que se asienta el volcán de Yellowstone.
Examinamos un espacio temporal que va desde 12,5 a 8 millones de años atrás. Queríamos identificar estas erupciones y averiguar con qué frecuencia ocurrieron, explicó Marc Reichow, de la Universidad de Leicester.
Reichow y su equipo observaron que durante este período hubo menos erupciones de las que se habían estimado previamente, pero mucho más grandes de lo que se creía.
Observar volcanes más antiguos ayuda a comprender cuál será el comportamiento más probable de Yellowstone, agregó el científico.