A causa de las medidas implementadas para enfrentar el brote del coronavirus, el déficit fiscal se incrementará de 1,6% del PBI registrado el año pasado a 10,7% este año, estimó el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF).
Ante este escenario, la titular del MEF, María Antonieta Alva, ha rechazado que se esté considerando un incremento en los impuestos para abordar esta situación.
“Quiero aclarar [un tema] porque hay algunos rumores que se están dando. No tenemos previsto en el Marco Macroeconómico Multianual un incremento de impuestos para sustentar el presupuesto 2021″, subrayó Alva.
“Creemos que [se] van a requerir medidas tributarias desde el 2022 en adelante”, agregó.
Ahora bien, durante la presentación de Marco Macroeconómico Multianual 2021-2024, el MEF realizó sus estimaciones de ingresos del Gobierno y de gasto no financiero, pero el Consejo Fiscal ha mostrado reparos al considerar que “el mayor riesgo [fiscal] estará determinado por la poca capacidad para generar mayores ingresos permanentes”.
Esto evidencia la urgencia de buscar otras fuentes de ingresos.
APORTES
Alva ha referido que “hay espacios para reducir los niveles de incumplimiento de pago de impuestos”.
Hugo Perea, economista jefe para el Perú del BBVA Research, compartió esta idea, pero mencionó que su ejecución debe darse en el corto plazo. Para ello, indicó que una opción interesante es poner énfasis en retomar el plan de emisión masiva de boletas electrónicas, entre otras que reduzcan los niveles de evasión.
“En otros países donde se implementó este esquema, el incumplimiento ha caído sensiblemente”, señaló.
Pero combatir la evasión tributaria no es el único espacio por trabajar y, a su vez, sería insuficiente para aumentar la recaudación.
Giorgio Balza, gerente de Consultoría Tributaria de PwC, indicó que también se deben realizar fiscalizaciones incisivas en sectores específicos.
“Se debe buscar nuevos recursos de fuentes que antes no aportaban”, dijo.
Así, indicó que uno de estos rubros es el de ventas mediante plataformas en línea.
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“Aquí hay herramientas para ponerles el foco vía el impuesto a las transacciones financieras (ITF). Hoy no tiene sentido ir a tiendas que están cerradas”, remarcó Balza.
Otro aspecto -indicó Balza- está orientado al campo de la elusión tributaria, donde se deben realizar inspecciones para esclarecer los regímenes tributarios a los que pertenecen las empresas.
“Se tiene que fiscalizar para que, en el momento en que se pueda cobrar, aumente la recaudación”, indicó Balza. Agregó que urge también evaluar la ampliación de la regla de subcapitalización.
De otro lado, Pamela Navarro, abogada laboralista, sostuvo que otra tarea es ampliar la base de recaudación, brindándole incentivos al sector informal para que migren.
“Para las empresas, un incentivo para que se formalicen es un régimen con menores tasas, además que accederían a nuevos programas de créditos”, anotó.
En este contexto, Perea refirió que solo reduciendo los actuales niveles a los registrados en el 2014 (cuando el incumplimiento en IGV e IR de tercera categoría eran de 29% y 48,5%, respectivamente) se daría un “avance importante”, pues se recaudarían casi S/8.500 millones adicionales.