De acuerdo con el Director General de Política de Ingresos Públicos del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), Marco Camacho, eliminar el Impuesto a las Transacciones Financieras (ITF) supondría perder S/ 224 millones en recaudación directa y más de S/ 2 mil millones por acciones de fiscalización que Sunat realiza en función de esta información.
MIRA: AFIN propone mejorar ley de contratación pública para que Gobierno a Gobierno sea temporal
Estas declaraciones, brindadas en la Comisión de Economía del Congreso de la República, obedecen a un proyecto de ley del congresista Ricardo Burga, que plantea derogar el ITF desde el primero de enero de 2021. Para Arturo Tuesta, socio de Tributación y Legal de PwC Perú, aunque el impuesto sea muy bajo (0.005% para operaciones mayores a S/ 3,500), se podría derogar solamente si el Estado tuviese otras formas de detectar operaciones sospechosas.
“Derogarlo no es necesario, en la medida en que la información sea bien usada. Nadie está a favor de levantar una herramienta que da esa información, salvo que el Fisco tenga otra y el ITF ya no le sirva. Los factores a analizar son; primero, cuánto cuesta recaudar y cuánto recaudo, y segundo, lo que se hace con la información que se recibe”, estimó.
En todo caso, comentó que debería ser el MEF el que realice esa evaluación y tampoco consideró que, actualmente, el ITF sea una determinante para la bancarización, porque el tema tributario no es lo determinante para realizar una operación bancaria, y porque no se aplica a todas las operaciones, están excluidos los depósitos por remuneración, pensiones, CTS, entre otros.
Escenario derogatorio
En esa misma línea, el tributarista Walker Villanueva, socio del Estudio Philippi, Prietocarrizosa, Ferrero DU & Uría, consideró que el ITF no es un impuesto relevante en términos de recaudación, pero sí es importante en términos de información, por lo que podría ser reemplazado por un sistema de información que ya existe.
“Ya se ha implementado un mecanismo para recabar la información sin necesidad de usar el ITF. Hace un par de años se modificó la ley de Banca, y se ha implementado la obligación de los bancos de informar a la Sunat sobre los cargos y abonos, con ciertos parámetros, distintos a los del ITF”, explicó.
Recordó que, en virtud de las recomendaciones de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), Sunat empezará -desde este mes- a compartir información bancaria y financiera con 113 países. No obstante, para evitar reducir la recaudación, lo más recomendable sería evaluarlo cuando pase la crisis.
“Ha perdido un poco de piso el ITF porque en esta última fase de intercambio de información, incluso con otros países, no se necesita un impuesto. Me parece que incluso hasta se superponen, pero también comprendo que, en una situación de crisis, quitar un impuesto como el ITF no es razonable”, indicó.