La Ciudad Autónoma de Ceuta (España) ha concedido hoy al escritor peruano Mario Vargas Llosa el Premio Internacional de Convivencia, en su décimo cuarta edición, en reconocimiento a los principios que defiende el autor, en particular en el tema de la inmigración.
La candidatura del escritor, presentada por la Federación Provincial de Asociaciones de Vecinos de Ceuta, ha obtenido el respaldo de la mayoría de los miembros del jurado, que han tenido que deliberar entre veinte candidatos al galardón.
La presidenta del jurado, Cecilia Fernández directora del Instituto Cervantes de Tánger (Marruecos), ha señalado que el premio se ha concedido por su defensa y promoción de los principios de la libertad, la democracia y el estado de derecho.
En este sentido, ha valorado que el galardón no ha premiado al autor que no necesita ningún reconocimiento más sino a la persona y a los principios que defiende, en particular su defensa del fenómeno migratorio que no ve como un problema sino como una solución.
El galardón está dotado de 30.000 euros (unos 38.500 dólares) y una escultura de la artista ceutí Elena Laverón, y con el mismo la autonomía ceutí reconoce a personas o instituciones de cualquier país cuya labor haya contribuido, de forma relevante y ejemplar, a mejorar las relaciones humanas fomentando los valores de justicia, fraternidad, paz, libertad, acceso a la cultura e igualdad entre los hombres.
El expresidente español Adolfo Suárez, el misionero Vicente Ferrer, la asociación Mensajeros de la Paz, el escritor y filántropo Dominique Lapierre, el Pueblo de El Salvador y el Pueblo de Madrid han sido galardonados con el Premio Convivencia.
Esta distinción también se ha concedido a la Asociación Víctimas del Terrorismo en España, el economista y Nobel de la Paz Muhammad Yunus, el músico Daniel Barenboim, la Fundación Miguel Gil Moreno, el científico Manuel Elkin Patarroyo, la activista surafricana Helen Lieberman y la oenegé Sonrisas de Bombay.
La organización todavía no ha fijado una fecha para la entrega del galardón.