El escritor peruano José Luis Torres Vitolas acaba de publicar en España Albatros, una novela de estructura fragmentaria que ayuda a comprender el régimen que vivió Perú durante la presidencia de Alberto Fujimori, pero sin sangre y con mucho respeto a las víctimas.
Hay partes tan inverosímiles en la historia de Perú que la literatura se queda corta, afirma el escritor en una entrevista con EFE. La dimensión, asegura, es tan grande que, ahora que se habla del indulto a Fujimori, él solo quiere decir que hay personas a las que solo puede perdonar Dios.
Aun así, explica que ni ha tratado de hacer una novela gore (en el texto se cuentan sin sangre las torturas que sufre una de los protagonistas), ni quiere ser cruento para deleite de otros; más al contrario ha intentado, dice, ser respetuoso con ese dolor. Pero además, añade, quería que ese dolor estuviese en la ausencia de lo que se está viendo.
INGENIERÍA LITERARIA Albatros habla de la degradación colectiva de un pueblo, del dolor endémico y del que llega por sorpresa y de recuerdos que se entrelazan y unen personas que no deberían haber vuelto a juntarse. Un original juego literario que el escritor, ingeniero industrial de formación, ha ensayado durante más de dos años hasta dar con la fórmula.
Yo hice mucho cómic y me gusta mucho el cine. Ambos te permiten escribir poco, porque la imagen ya está contando, pero tú puedes pasar de una viñeta a otra y cambiar de plano, de historia, solo con el color; son recursos visuales que vivimos constantemente, cuando vemos la tele o cuando hablamos, uno habla y piensa en cosas a la vez. Esa fragmentación era la que yo buscaba y dije: vamos a probar.
Y lo consigue: en ningún momento el lector confunde un pensamiento con una acción, la autoría de la frase o el lugar y el tiempo en que se produce. El truco, explica el autor, es aplicar técnicas de ingeniería a las pautas de escritura.
Yo creo que todo se puede cuantificar y se lo aplico a todo. A final de cuentas, todo texto narrativo es una bonita ecuación en la que el lector tiene que descifrar la equis; el recurso está en que tú le des las pistas para ello, resume.
Un reto importante de cara al público español, poco familiarizado con lo sucedido esos años en Perú, que el escritor adereza con la jerga que se usaba allá en los años noventa, palabras desconocidas para el castellano español que se comprenden según avanza el relato.
Albatros es también el nombre real de una librería suiza con la que Torres Vitolas juega, al igual que hace con las historias que cuenta: todas salen de experiencias auténticas conocidas y las personas son reflejos de otras que existieron.
EL ARGUMENTO La novela hilvana de esta manera las vidas de varias personas salpicadas de una forma u otra por la violencia que vivió Perú en los meses previos al autogolpe de 1992 de Alberto Fujimori, presidente entre julio de 1990 y noviembre del 2000, actualmente condenado a 25 años de cárcel por crímenes de lesa humanidad y delitos de corrupción.
Torres Vitolas vive en España desde 2004, donde, junto a su esposa, ha fundado la editorial Casa de Cartón en la que publica autores, sobre todo latinoamericanos, de un gran calado intelectual: Juan Carlos Méndez Guédez, Juan Carlos Chirinos, los gallegos Carlos Andrade y Blanca Riestra, Ricardo Sumalavia y Jorge Eduardo Benavides, entre ellos.
Albatros (Lengua de trapo), premio Alfonso el Magnánimo de Narrativa en Castellano 2012, es la primera novela del autor, que ha publicado entre otros el libro de microrrelatos L, la novela infantil El sapito y el libro de relatos 5:37.