No es raro que las obras de ficción a veces utilicen elementos de la vida real para dar un trasfondo más creíble a sus historias. Este fue el caso de Stephenie Meyer que utilizó elementos de una tribu de indios norteamericanos, los Quileute, para tener un contexto más creíble con los orígenes de los hombres lobo en “Crepúsculo”.
MIRA AQUÍ: La oscura historia de Rosalie Cullen en “Crepúsculo”
La saga de películas de “Crepúsculo” comenzó en 2008 y convirtió a sus actores en verdaderas estrellas de Hollywood. Si bien la franquicia fue decayendo poco a poco en popularidad, el primer impacto que surgió en los espectadores y los críticos definió toda una era en las historias de vampiros y hombres lobos.
Con todo esto dicho, pareciera que fue positivo que Meyer haya utilizado elementos de la Tribu Quileute para su historia, y de hecho lo fue en un inicio. Sin embargo, con el pasar de los años esto se convirtió en un problema y hasta el día de hoy se habla de la polémica que surgió a raíz de esta mención.
MIRA AQUÍ: 10 cosas sobre la relación de Bella y Edward que no tienen sentido
¿Qué pasó exactamente durante los años de éxito de la saga de “Crepúsculo”? Screenrant ha publicado un pequeño resumen de todo lo que pasó entre la tribu que la autora usó como inspiración y por qué existe una crítica muy dura contra ella al no ceder ningún tipo de regalías por el uso de su historia y mitología.
LA POLÉMICA DE “CREPÚSCULO” CON LA TRIBU QUILEUTE
Los llamados Quileute son una pequeña nación soberana que ahora tiene aproximadamente 2000 miembros. El pueblo Quileute es una verdadera tribu de nativos americanos cuya herencia cultural proporcionó la inspiración para la tribu de hombres lobo de “Crepúsculo”, que incluso comparten el mismo nombre.
A pesar de muchas divergencias con la historia real del pueblo Quileute, la tribu no solo se menciona por su nombre en la saga, sino que su reserva real también se usa como escenario para gran parte de la acción de la secuela de “Luna Nueva”. Como se recuerda, Jacob Black es un miembro de la tribu Quileute en la serie, al igual que el resto de su manada.
Meyer utilizó la simbología de los “caminantes de la piel” que proporciona la mística de los Quileute y lo convirtió en la columna vertebral de la licantropía en “Crepúsculo”. La historia cambió gran parte de la tradición de los vampiros para adaptarla a sus intereses y la misma se tomó mucha libertad creativa con los mitos de Quileute.
Sin embargo, como señaló la propia tribu, “Crepúsculo” hizo cambios en sus mitos que llevaron a muchos fanáticos a combinar el Quileute de la vida real con sus contrapartes ficticias. Los mitos de la gente de Quileute no mencionan a los “fríos”, por ejemplo, y en lugar de transformarse en lobos, los dos primeros miembros de la tribu se transformaron en personas a partir de lobos.
Un caso particularmente polémico de la alteración de la historia Quileute de la saga “Crepúsculo” fue el tatuaje del pueblo. No solo se tomó de la historia de la tribu, sino que también la alteraron y mezclaron con la de otra tribu para lograr un efecto estético. En las películas, se representa a la manada de lobos Quileute con un tatuaje compartido por todos sus miembros, similar al escudo de la familia Cullen.
La representación del tatuaje de dos lobos gemelos, uno para representar la fuerza y el otro para la solidaridad, tiene sus raíces en una historia real de Quileute. Sin embargo, el tatuaje en sí fue diseñado por una artista no nativa que tomó prestado el estilo artístico de una tribu diferente, la nación Haida, en su diseño.
Los Quileute no solo no recibieron compensación por el diseño del tatuaje a pesar de estar basado en su leyenda oral, sino que la decisión de mezclar los estilos e historias de dos tribus agravó aún más la idea errónea y los estereotipos de las poblaciones nativas por parte de la franquicia.
A todo esto, la polémica más grande se generó a raíz que la tribu en sí no recibió ni un centavo de las ganancias de la franquicia. Meyer, los productores, compañías y actores hicieron mucho dinero con la franquicia, pero nada fue a parar a manos de la entonces tribu de solo 700 habitantes.
Si bien es cierto que al principio la tribu se benefició de que la franquicia brindara nuevos visitantes a su pueblo, este interés decayó rápidamente cuando las personas se olvidaron de las películas. En última instancia, terminó siendo un ejemplo más de como los artistas de piel blanca se apropian de culturas ajenas para sus productos, generando ganancias millonarias sin medir sus consecuencias.