Cuando un joven de Texas, Estados Unidos, llamado Sam sufrió un infarto, más de un presente en la escena lo ayudó, pero fue Amy Pitre quien actuó rápidamente. Ella se convirtió en su ángel de la guarda y le salvó la vida. La novia de Sam, Kelsey Mazak, decidió que fuera su invitada de honor el día de su boda.
“Esta es mi heroína, Amy Pitre. Para aquellos que no saben, Sam sufrió una muerte cardíaca súbita cuando regresaba a casa en octubre. Debido a que dos transeúntes llamaron al 911 de inmediato, y debido a que Amy fue la primera en llegar a la escena, Sam está vivo”, contó en su Instagram.
Invitada de honor
Es por ese motivo que, cuando llegó el día de la boda de Sam y Kelsey, no dudaron en invitar a Amy para esta celebración. Gracias a su rápido actuar el joven recibió atención médica en el tiempo justo y así se mantuvo con vida. Por ello fue considerada como una invitada de honor este día especial.
“Después de una semana muy aterradora en el hospital, Sam llegó a casa un poco más biónico con un marcapasos/desfibrilador. Tuvimos mucha suerte de haberla conocido y de tenerla como invitada de honor en nuestra boda. Ella será para siempre parte de nuestra familia”, dijo Kelsey en su post.
Celebran la vida
Kelsey no dudó en celebrar la vida de su ahora esposo con un emotivo mensaje que compartió en otra publicación en su cuenta de Instagram.
“Este hombre aquí es realmente el ser humano más amable, inteligente, paciente y de voluntad fuerte que he conocido. Hubo un momento el año pasado en el que realmente tuve que asimilar cómo sería la vida sin ti y puedo decir, con la mayor certeza, que es una vida que no tengo ningún interés en experimentar”, escribió.