Los padres están en las buenas y en las malas, para cualquier ocasión y dispuesto en ayudar a sus hijos. Este hecho ocurrió en China, donde un hijo junto a su progenitor pasaron un año estudiando para un examen que, lamentablemente, reprobó. El hombre se enteró del resultado y demostró su tristeza y frustración. La historia se hizo viral en YouTube.
El sujeto, durante un año, se la pasó preparando al menor para el examen final de matemáticas en el cual, para aprobar, necesitaba obtener tan solo 6 puntos de los 100 totales.
Los medios locales del gigante asiático informan que, durante dicho periodo, ambos pasaban largas horas en ejercicios de esta materia, incluso, que en no pocas ocasiones se desvelaban hasta altas horas de la noche. Un sacrificio que, lamentablemente, no pudo dar sus frutos.
Llanto de decepción
Por eso, cuando se enteraron que el joven no obtuvo la calificación mínima, lo que significaba que no había pasado exitosamente la prueba, lo que a su vez representaba un año de esfuerzos y sacrificios que no sirvieron, el padre echó a llorar desconsoladamente, cuya reacción fue captada en video, la misma que rápidamente se hizo viral.
En las imágenes vemos al hombre llorando de pena, pero también de frustración, con un poco de amargura porque su hijo, a la hora del reto, no estuvo a la altura de lo esperado: “Ya no me importa. Mis esfuerzos fueron en vano. Que se las arregle por sí mismo”, se escucha decir al padre visiblemente afectado por la mala noticia.
El testimonio de la madre
Sin embargo, en la cinta también escuchamos a una persona reírse, pero no vemos; se trata de la madre del menor y esposa del padre quien, tras ser contactada por los medios locales, aseguró que su hijo no recibió educación inicial.
Asimismo, comentó que el menor, pese a esto, siempre tuvo un desempeño dentro de lo esperable, al punto que sus calificaciones siempre rondaban en un promedio de 40 sobre 90.
Opiniones divididas
Por su parte, en redes sociales chinas como de otros países alrededor del mundo, los usuarios de estas plataformas alabaron la dedicación del padre durante todo ese tiempo, pero también reflexionaron sobre lo difícil que resulta la crianza de lo hijos.
Otros, por el contrario, echaron la culpa del mal resultado del menor al propio padre, asegurando que su responsabilidad radica en el hecho de no ser un buen maestro de matemáticas para el chico, donde algunos señalaron que estudiar hasta altas horas de la noche no es la mejor metodología de enseñanza.