A la hora de viajar en avión es importante cuidar nuestro comportamiento no solo por la comodidad de la tripulación, sino también por el bienestar de todos los pasajeros. Para ayudarnos en esta tarea, una joven azafata se animó a revelar las actitudes que más exasperan a un auxiliar de vuelo.
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Caroline Skahn trabaja desde hace cinco años como azafata y, en conversación con el medio Insider, aseguró que hay prácticas específicas que todo viajero debería evitar.
11 cosas que nunca deberías hacer cuando viajas en avión:
- Ignorar a las asistentes de vuelo que te reciben en la puerta: “Te sorprendería saber cuántas personas suben a bordo y ni siquiera hacen contacto visual con nosotros, pero aún así intentarán entregarnos su basura en su camino sin decir una palabra”, explica la joven.
- Quitarse los zapatos: Según Skahn, hay dos razones fundamentales para dejar de hacerlo: “es asqueroso y tus vecinos de silla probablemente no adoran oler pies”.
- Que se quieran quitar la mascarilla: La pandemia tiene ya bastante tiempo, pero sigue siendo un problema a nivel mundial y resulta desgastante para las auxiliares de vuelo recordarle a los pasajeros que no se quiten el tapabocas.
- Despertar a tu compañero de asiento por comida: “Si tu vecino es un extraño y está durmiendo, no lo despiertes. Te juro que no tiene tantas ganas de comer comida de avión”, dice Caroline. A fin de cuentas, si despierta y desea algo puede usar el timbre para pedirlo.
- Preguntar a dónde va el avión: las azafatas trabajan en varias rutas distintas y no tienen una asignada, por lo que no conocen exactamente en qué parte del planeta se encuentra la nave.
- Que se paren para estirarse: es bastante común que los pasajeros utilicen el área de la cocina como gimnasio tras varias horas de viaje. “No solo es frustrante, sino que además es una regla del ente regulador de aviación: no podemos tener pasajeros aglomerados en esas áreas”, sostiene Caroline.
- Levantarse durante las turbulencias: “Creo que a veces la gente olvida que está a 9.000 metros sobre el suelo en un tubo de metal y que el clima no es predecible”, dice la joven.
- No vigilar a sus hijos: “Amo a los niños y estoy feliz de poder ayudarlos si lo necesitan, pero el hecho de que sea asistente de vuelo no significa que sea automáticamente niñera. Cada día veo a algunos padres subirse a un vuelo (…) y dejar a sus hijos desatendidos”, expresa.
- Usar el baño apenas la nave despega: La aeromoza recomienda utilizar el baño antes de abordar o esperar hasta que los asistentes de vuelos ofrezcan las bebidas. Hacerlo apenas entras al avión puede retrasar todo el proceso.
- Discutir la política de las mascarillas: “Independientemente de la opinión que tengas tú o que tenga yo en lo que respecta a las máscaras, sigue siendo mi trabajo hacer cumplir la política en el avión”, explica.
- Tocar el timbre para darles la basura: “Es frustrante cuando alguien toca el timbre de llamada para que podamos recoger la basura, porque probablemente estábamos allí, y es posible que no tengamos guantes o una bolsa de basura con nosotros”, confiesa Caroline.
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