La fotografía del efusivo abrazo entre una voluntaria de la Cruz Roja y un hombre de Senegal que acababa de cruzar la frontera entre Marruecos y España, en la ciudad de Ceuta se hizo viral en más de una red social no por lo emotivo del momento, sino por los ataques racistas y xenófobos dirigidos hacia uno de sus protagonistas.
En la imagen, la joven, identificada como Luna, abraza al migrante que llora desconsoladamente y se apoya en ella, mientras que a pocos metros personal de la ONG atiende a un amigo suyo intentando salvarle la vida.
La fotografía fue difundida a través de las redes sociales y dio la vuelta al mundo por visibilizar el trabajo y la solidaridad que caracteriza a los trabajadores sociales; sin embargo, Luna empezó a recibir comentarios de odio y amenazas de parte de personas indignadas por la llegada de miles de migrantes a tierras españolas.
Este es el caso, por ejemplo, del europarlamentario de Vox, Hermann Tertsch, quien comentó: “La víctima y la salvadora o el abusador y la idiota. Toda una representación de Europa haciendo el gilipollas”.
No obstante, el hashtag #GraciasLuna se volvió tendencia en España y miles de personas, entre políticos, artistas y personas anónimas, se animaron a mostrarle su apoyo a la joven que se convirtió en un símbolo de esperanza por su gesto.
Tras el hecho, Luna conversó con un medio local y dio detalles sobre la escena que dio la vuelta al mundo:
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