Aunque a Alexéi Navalny lo han llevado a un campo de trabajo para alejarlo de la luz pública en Rusia, el opositor al Kremlin sigue agitando el avispero, convirtiéndose en una piedra en el zapato de Vladimir Putin, que apenas el lunes firmó la ley que le permitirá mantenerse en el poder hasta el 2036.
El pasado 31 de marzo, Navalny, de 44 años, anunció que entraba a una huelga de hambre en protesta por sus condiciones de detención e incluso acusó a las autoridades penitenciarias de ser sometido a torturas, como la privación constante de sueño.
- Rusia: detienen a médicos y a periodista de CNN frente a prisión donde está el líder opositor Alexei Navalny
- Alexei Navalny se declara en huelga de hambre desde la cárcel y sigue denunciando abusos
- Líder opositor ruso Alexei Navalny denuncia “tortura” mediante la privación de sueño
Ahora, sus abogados y partidarios volvieron a ponerlo en los titulares -algo que no le agrada al mandatario pese a saber que el opositor tiene un marginal apoyo popular en el país- cuando intentaron ingresar junto a un grupo de médicos a la prisión de Prokov, donde purga una condena de dos años y medio, para verificar su estado de salud, que se ha deteriorado en las últimas semanas.
Las alarmas se activaron el lunes cuando el propio Navalny publicó en sus redes sociales que sufría de una fuerte tos y fiebre, además de dolores en la espalda y piernas. Un medio ruso señaló que fue trasladado a una unidad médica de la prisión para descartarle COVID-19; sin embargo, no se ha sabido más de él.
Las autoridades de la prisión impidieron a los galenos de la Alianza de Médicos, liderada por la doctora Anastasia Vasilieva, médica personal y estrecha colaboradora de Navalny, y los detuvieron, así como al corresponsal de CNN en Moscú, Matthew Chance, quien fue posteriormente liberado.
La policía también detuvo al periodista Dmitry Nizovtsev y a Ksenia Pakhomova, ex coordinadora de la sede de la organización de Navalny en Kemerovo, según reportó el portal opositor MBK Media.
Los agentes policiales consideraron que frente a la cárcel se estaba realizando una protesta no autorizada, luego de pedirles varias veces que se retiraran, por lo que procedieron a los arrestos.
El Gobierno Ruso, como era de esperarse, no quiso dar mayor información. “Si realmente se trata de una enfermedad, se garantizará el tratamiento adecuado”, se limitó a responder el portavoz de la Presidencia rusa, Dmitri Peskov, en su rueda de prensa diaria.
Peskov indicó que no se puede hablar de la creación de unas “condiciones especiales para alguno de los reclusos”, pero añadió que “hay unas normas establecidas, incluidas las que guían el trato con los que han enfermado”.
MIRA: Las prisiones rusas del horror: los campos de trabajo donde el abuso y la represión son la ley
Dos versiones
La situación médica de Navalny no se centra solo en su exposición al coronavirus en prisión, sino que apenas unos meses atrás sobrevivió a un envenenamiento con novichok, una sustancia mortal que lo tuvo en coma y del que se recuperó en Alemania. Según él, fue intoxicado por agentes del gobierno.
Según su abogada Olga Mijailova, la cárcel de Pokrov carece de enfermeros y médicos especializados y afirmó que Navalny ha bajado de peso considerablemente: de 93 kilos, cuando llegó al campo de trabajo a mediados de marzo, a 80 kilos.
La propia Mijailova denunció hace 10 días al canal de televisión Dozhd, que su estado de salud era “extremadamente desfavorable”. “La pierna derecha se le entumece, no puede apoyarse en ella. De hecho, la pierna está en un estado terrible”, expresó, según recogió el diario “La Vanguardia”.
Sin embargo, el Servicio de Prisiones aseguró hace una semana que el estado de salud de Navalny es “estable y satisfactoria”.
Contra las redes sociales
El caso Navalny también ha salpicado a las redes sociales. Un tribunal ruso ha impuesto una multa de 34 mil dólares a la popular aplicación Tik Tok por no haber eliminado videos de las protestas a favor del encarcelado opositor.
Estas masivas manifestaciones – que no fueron autorizadas por las autoridades- se realizaron a finales de enero y terminó con la detención de miles de personas en diferentes ciudades.
Pero no solo eso. El viernes, un tribunal de Moscú condenó a Twitter a tres multas por un total de 8,9 millones de rublos (116.700 dólares) por la misma violación que TikTok, y el regulador ruso de telecomunicaciones, Roskomnadzor, también piensa sancionar a Facebook y YouTube.
Adicionalmente, Twitter está en el punto de mira de las autoridades rusas, quienes el lunes anunciaron que seguirán dificultando el acceso a Twitter hasta mediados de mayo y ralentizando la subida de contenido tras ser acusada de promover el suicidio entre jóvenes, drogas y pornografía infantil. Sin embargo, la plataforma -que ha contribuido a propagar los mensajes opositores- no será bloqueada pues consideraron que ya comenzó a retirar parte de contenido prohibido.
VIDEO RECOMENDADO
TE PUEDE INTERESAR
- Sacerdote arranca mascarillas a fieles en Honduras; es una “babosada”, dice | VIDEO
- Chile anuncia la compra de 1,8 millones de vacunas contra el coronavirus de una dosis a la china CanSino
- Un presidente intachable y con un “magnífico legado”: cómo es la nueva web de Donald Trump
- “Me vine porque no teníamos qué comer”: De Guatemala a EE.UU., la solitaria odisea de un niño inmigrante
- El alarmante hacinamiento en el principal centro de detención para niños migrantes en EE.UU. | FOTOS
- Las “colas del hambre” regresan a Europa por el coronavirus; no se veían igual desde la Segunda Guerra Mundial