El cardenal Keith OBrien, quien renunció al liderazgo de la Iglesia Católica escocesa y quedó fuera del cónclave que eligió al papa Francisco por las acusaciones de acoso sexual contra otros curas, se irá de Escocia, anunció hoy el Vaticano.

OBrien estará fuera de su país por muchos meses con el propósito de la renovación espiritual, el rezo y la penitencia, se informó desde la Santa Sede.

El cardenal accedió a esta nueva etapa por las mismas razones que lo dejaron fuera del proceso de elección del papa, agregó el comunicado.

En febrero, OBrien se disculpó por su conducta, admitiendo que había caído por debajo de lo que se esperaba de él. Su declaración se produjo después de que la prensa publicó informes semanales donde sacerdotes lo acusaban por acoso sexual.