Caos y angustia. El descarrilamiento de un tren de carga en el barrio más grande y poblado de Nairobi, ha dejado a cinco personas en estado de gravedad, y puesto en riesgo las viviendas de varias familias.

El accidente ocurrió hoy a las 10:00 a.m. (2:00 a.m hora peruana) en la capital de Kenia. Las versiones sobre el número de heridos difiere.

Para algunas autoridades, como el Jefe de la Policía, Beson Kibue, aún no puede determinarse con seguridad la cantidad de víctimas. Mientras que para otros, como el ministro de transporte, Michael Kamau, al menos seis personas han sido llevadas al hospital.

Además del personal de rescate y agentes de seguridad, que intentan frenar el saqueo de combustible de los vagones, o la ola de robos de las casa afectadas por el descarrilamiento, se suma con su respaldo, la Cruz Roja de Kenia.

Unidades de refuerzo están en marcha para remover todos los escombros, tuiteó @KenyaRedCross desde Kimera, nombre del barrio donde ocurrió el accidente.

El titular responsable del transporte aseguró a Al Jazeera que el gobierno ha solicitado a la población no colocar residencias en el borde de las rieles de tren. Sin embargo, la población asegura no saber dónde vivir.

Hay mucha tensión, se puede sentir. La policía está evacuando o impidiendo a la población ingresar a la zona del siniestro, indica Kamau. Y con pesadez y lamento agrega: La población está muy preocupada por que sus hogares sean afectados por el tren cuando sus vagones sean volteados.

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Contenido de El Comercio Perú