El sentido arácnido de la policía de Vietnam está alerta frente a los forajidos en dos ruedas.
Pareciera que el personaje de historietas Spiderman hubiera inspirado la más reciente herramienta de la policía vietnamita en el combate de los motociclistas que no reducen la velocidad, ni mucho menos se detienen en los puntos de control.
Según cuenta el periódico estadounidense Global Post, se trata de una pistola que no dispara balas, sino redes, con el objeto de detener a los conductores que no obedecen la voz de alto.
La idea original la tuvieron hace varios años policías de la provincia industrial de Thanh Hoa, afectada por un serio problema de carreras ilegales o piques en las calles.
Los uniformados probaron a lanzarle redes de pescadores a los ofensores. El éxito, dijeron, fue total: las ruedas se enredan en las redes y las motos se detienen.
Sin embargo, lanzar una red sobre una motocicleta que se desplaza a toda velocidad puede resultar todo un reto para el policía más curtido.
Por eso, las autoridades de Thanh Hoa unieron esfuerzos con los laboratorios del ministerio de Defensa para crear una pistola de red, un dispositivo que consta de una especie de cacha de pistola unida a un cilindro largo, que carga la malla en cuestión.
SOLUCIÓN EFECTIVA No es exactamente el lanza-redes de que el Hombre Araña dispone en sus muñecas, pero se trata de una solución muy económica y efectiva, según dijo en 2012 el jefe provincial Trinh Van Chien.
La pistola puede alcanzar el objetivo hasta una distancia de 15 metros.
Según Trinh Van Chien, muchos de los motociclistas le temen al dispositivo. Gracias a éste, la policía ha podido dispersar a gupos de jóvenes velocistas, que constituyen una amenaza para los residentes locales.
En Vietnam la motocicleta es reina: se calcula que hay una por cada tres habitantes.
Son un verdadero problema. Las calles son angostas y representan un peligro para las personas que andan a pie, dice el jefe del Servicio Vietnamita de la BBC, Giang Nguyen.
No hay manera de atrapar a las personas que no se paran en los puntos de control. No hay un sistema de datos que permita encontrar a alguien con el número de la placa y ponerle una multa, agrega.
Sin embargo, el uso de la red no resultó muy popular al principio. Cuando el servicio vientamita le preguntó a sus lectores qué opinaban al respecto, la respuestas variaron de es algo estúpido a completamente inútil, refiere Nguyen.
De hecho, hace dos años la provincia de Thanh Hoa decidió suspender su uso. Pero a principios de 2013 la práctica fue retomada, con auxilio de la nueva tecnología.
Y, al parecer, la opinión pública comenzó a ver los beneficios.
Dado que Vietnam no tiene acceso a tecnologías más avanzadas y costosas, vale la pena repetir estas pequeñas iniciativas en todo el país, opinaba Nguyen Buu Chau en el periódico vietnamita Touj Tre (La Juventud) hace pocos días.
Yo propondría vender este lanzador de redes a la población en general, para que puedan usarlo para atrapar a ladrones de perros y motos, escribía Truong Quan My en la misma publicación.
Según un informe de Global Post, la pistola podría comenzar a ser producida en masa y distribuida a otras provincias vietnamitas en breve.