La corrupcin en el Per es una historia que se repite.
El historiador Alfonso Quiroz, autor del libro Historia de la corrupcin en el Per y de artculos sobre el tema, identific varios perodos de corrupcin en nuestra etapa republicana. Por ejemplo, las dcadas de 1990, en el perodo de Alberto Fujimori; de 1920, durante el mandato de Augusto Legua; y de 1850, poca de la consolidacin y conversin de la deuda interna y de la manumisin de los esclavos.
Quiroz tambin determin que, despus de ciclos de muy alta corrupcin, lapsos de unos 10 aos en los que el dinero desviado a la corrupcin oscilaba entre 4% y 7% del PBI, se daba una reaccin ciudadana de rechazo, aunque pasajera.
Al pasar u olvidarse esa reaccin, segn el principio de borrn y cuenta nueva, se vuelven a presentar los incentivos altos y las inhibiciones laxas que generan un nuevo ciclo de creciente corrupcin, sealaba Quiroz en el texto que escribi para el libro El pacto infame, estudios sobre la corrupcin en el Per.
El ltimo gran episodio de corrupcin descrito por Quiroz fue el del gobierno de Fujimori.
El presidente ejecutivo de Protica, Walter Albn, record que, despus de lo ocurrido con Fujimori, los partidos que eran de oposicin y defendieron la democracia juraron trabajar contra la corrupcin, pero todos decepcionaron.
No se preocuparon en cambiar la situacin para que no se repitiera, acot Albn.
Para el socilogo Gonzalo Portocarrero, estamos ante una nueva crisis por escndalos como el de Odebrecht o Lava Jato, en la que estn implicados los ex presidentes Alejandro Toledo y Ollanta Humala. Pero tambin cree que estamos frente a una nueva oportunidad en la que se puede tomar en serio a la corrupcin como problema.
Medidas y mediciones El Ejecutivo ya ha dictado medidas anticorrupcin, algunas a raz de los casos mencionados o por otras iniciativas. Como parte de las facultades legislativas que tuvo el gobierno de Pedro Pablo Kuczynski, se dictaron siete decretos para combatir la corrupcin. Algunos recogieron propuestas de la Comisin Presidencial de Integridad. Otra medida fue prohibir que empresas implicadas en casos de corrupcin vendan sus activos sin autorizacin del Estado.
En el Congreso tambin se aprobaron iniciativas, adems de investigarse casos como Lava Jato a travs de comisiones especiales.
Pero Albn y Portocarrero consideran que no todo puede quedar en el campo de los polticos.
Creo que mucho depende de la opinin pblica, de los medios de comunicacin y del Poder Judicial, dijo Portocarrero.
Pretender que esto lo resuelvan quienes estn en el aparato del Estado es una pretensin que no va a buen puerto, afirm Albn, quien recalc que es necesaria una sociedad con un rol ms protagnico.
Y si bien ambos destacan el papel que la opinin pblica debe tener para buscar soluciones y mejoras, esta tambin necesita un cambio, de acuerdo a las ltimas encuestas.
En la de El Comercio-Ipsos de febrero pasado, cuando se pregunt sobre la extensin de la corrupcin en el pas, el 51% de entrevistados consider que la mayora de peruanos son corruptos, el 39% que algunos son corruptos y el 9% que todos lo son.
Como era previsible, los polticos tampoco se salvaron. En el mismo estudio, el 47% indic que la mayora de polticos son corruptos, el 40% que todos lo son y el 13% que algunos lo son.
A nivel de percepcin, tampoco hay un buen panorama. En el ndice de percepcin de la corrupcin 2016 de Transparencia Internacional, publicado en enero, el Per cay varias posiciones. Ahora est en el puesto 101 de los 176 pases incluidos en el rnking. En la medicin del 2015, estuvo en la casilla 88.
Segn Albn, se podra estar peor, ya que el ndice se elabor antes de que se conocieran los ltimos escndalos de Odebrecht y Lava Jato.
Es evidente que ahora hay mucho mayor conciencia del grado de penetracin de la corrupcin, recalc.
MS EN POLTICA