El ex presidente Alan García expresó su rechazo a la recomendación que hizo la megacomisión para acusarlo constitucionalmente por supuestas irregularidades en el programa “Agua para todos” durante su gobierno y la calificó como una maniobra política.

“Es una acusación formulada por tres enemigos políticos que votaron por ella y no tiene ningún valor jurídico o político”, aseguró a través de un comunicado de prensa.

Asimismo, indicó que la recomendación salió a la luz hoy para “ocultar que se entregó la cabeza del canciller por orden del gobierno venezolano a cambio de los recursos chavistas recibidos en las campañas presidenciales del 2006 y el 2011”, en referencia a la renuncia de Rafael Roncagliolo.

Quienes votaron a favor de la acusación fueron los congresistas Juan Pari, Cristóbal Llatas y Sergio Tejada, este último presidente de la megacomisión.

IRREGULARIDADES El ex mandatario precisó que el Congreso, antes de que asumiera el cargo el 2006, aprobó una ley que aceleraba las obras del programa social, sobre el cual Alejandro Toledo formuló observaciones al final de su gobierno.

“En el primer día de mi gobierno yo retiré esas observaciones () No hay delito ni falta”, indicó.