El secretario general del Partido Aprista, Jorge del Castillo, minimizó la ausencia del ex presidente Alan García en la foto oficial tras la reunión de líderes políticos realizada ayer en Palacio de Gobierno, donde se analizó el escenario ante la proximidad del fallo de la Corte de La Haya sobre el diferendo marítimo con Chile.
“Lo importante y sustancial era estar ahí presente, la fotos es accesoria. Alguien seguramente lo podrá criticar, pero eso era secundario”, manifestó en Canal N.
Del Castillo contó que García Pérez se retiró cuando concluyó la reunión y no antes, y precisó que no participó en la foto, porque tenía que dictar clases a las 6 de la tarde en el Instituto de Gobierno y Gestión Pública que dirige.
También explicó que la carta de invitación llegó el sábado en la noche y que recién el lunes en la mañana se percataron que estaba ahí. “Cuando ya se confirma eso, él toma la decisión de asistir”, añadió.
Sobre el contenido de la reunión, Del Castillo indicó que el presidente Ollanta Humala hizo una introducción sobre el tema, la que fue ampliada por la canciller Eda Rivas y que luego el agente peruano ante La Haya Allan Wagner dio un informe.
También sostuvo que la vista del presidente chileno Sebastián Piñera a Estados Unidos, donde sostendrá una reunión con el mandatario de ese país, Barack Obama, no tiene nada que ver con La Haya.
SERENIDAD ANTE FALLO Por su parte, el vocero de Gana Perú, Jaime Delgado, destacó que todas las fuerzas políticas del país hayan enviado a sus representantes a la cita en Palacio de Gobierno, lo que demostró que “por encima de los intereses partidarios y políticos” está el país.
Delgado opinó que el Perú debe esperar con total serenidad el fallo que dará la Corte de La Haya, estimado para mediados de julio. “El mensaje es claro, tenemos que actuar con absoluta serenidad. Sea cual fuera la decisión se debe acatar el fallo de La Haya”, añadió.
Finalmente, advirtió que en Chile se vive un ambiente electoral y que algunos sectores podrían aprovechar la sentencia de la Corte Internacional de Justicia para sus propios fines. Aunque recordó que el gobierno de Piñera tiene la posición de respetar el fallo.
“Sería un suicidio (para Chile) no acatar el fallo de La Haya. Ya no estamos en los tiempos en los que podías vivir a espalda de la comunidad internacional”, acotó.