El lunes 2 de diciembre, la Procuraduría Anticorrupción solicitó formalmente a la Fiscalía de la Nación incluir en las investigaciones por las conmutaciones de penas a sentenciados por narcotráfico al ex presidente Alan García.

Según la acusación, revelada por “Hildebrandt en sus trece”, el líder del Partido Aprista habría incurrido en los presuntos delitos contra la administración pública, cohecho pasivo propio y asociación ilícita para delinquir en agravio del Estado.

El documento, redactado por el procurador Julio Arbizu, señala que una de las hipótesis que bajara es que García Pérez habría formado parte de una organización delictiva que beneficiaba a internos a cambio de dinero.

En esa línea, señala que “ese dinero ilícito habría sido destinado a solventar la campaña electoral del 2011”.

La Procuraduría Anticorrupción indica que la responsabilidad de García Pérez recae que en su potestad de conceder indultos y conmutar penas, posibilitó la salida de prisión de narcotraficantes.

“Al liberar a condenados por narcotráfico, García Pérez soltó a las calles a individuos que- en altísimo porcentaje- volvería a delinquir, atentando contra la salud pública y el Estado de derecho”, agrega la solicitud.

Además, Arbizu argumenta que la política de deshacinamiento de los penales “no tuvo un sustento técnico ni científico ni revestimiento formal alguno, puesto no existiría acta de sesión del Consejo de Ministros donde se haya debatido y aprobado dicha política”.

LA TAREA DE PASTOR La Procuraduría Anticorrupción también señala que el ex presidente García le encargó a su ex ministro de Justicia Aurelio Pastor “que impulsará y acelerara personalmente el trámite de las conmutaciones, exigiéndole periódicamente que reportara los avances”.

En breve comunicación con elcomercio.pe, Arbizu confirmó que su despacho hizo esta solicitud a la oficina de José Antonio Peláez Bardales.

El procurador evitó brindar detalles sobre el pedido para que incluyan a García Pérez en las investigaciones fiscales del Caso Narcoindultos.

Para concluir, Arbizu negó que él haya filtrado el documento a la prensa.