Foto: Archivo El Comercio
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En los ltimos aos se ha dado un debate sobre la posibilidad de construir un nuevo sistema de transporte masivo para Lima: distintos expertos han tomado una postura en torno a la opcin del BRT (Autobs de Trnsito Rpido, por sus siglas en ingls), como elMetropolitano, otros en torno al tren subterrneo. En resumen, el BRT tiene una capacidad adecuada para la densidad y demanda que tenemos hoy en Lima, es mucho ms rpido de implementar y mucho ms econmico de construir que un subterrneo. Sin embargo, el subterrneo es un smbolo de progreso y modernidad, un hito que representa el estatus de una ciudad y, dependiendo de la configuracin del sistema, puede lograr capacidades ms altas y tiempos de viaje ms cortos que el BRT.

En marzo tuve la oportunidad de conocer a Washington Fajardo, asesor del alcalde de Ro de Janeiro sobre temas urbanos. l comparti su experiencia en Ro, donde estn construyendo un gran sistema de BRT compuesto por cuatro lneas que suman ms de 150 km. Este sistema formar parte del legado de los Juegos Olmpicos 2016. Con una reduccin de los tiempos de viaje en ms de la mitad, este proyecto aumentar la productividad y mejorar la calidad de vida de ms de 1,5 millones de personas, que lo usarn diariamente.

El proyecto de Ro resolver muchas necesidades urgentes hoy, pero el diseo es flexible para cambiar a un metro subterrneo en el futuro si fuera necesario, utilizando el mismo espacio. Esto es posible gracias a que la va dedicada al transporte masivo se segreg desde el inicio para el BRT. Ms adelante, utilizando un sistema constructivo de corte y tapa, se excavara un tajo directamente de la superficie y luego se tapara con una losa, pudiendo mantener o no el BRT en el lugar inicial. Con este sistema de construccin, un metro puede costar un tercio de lo que costara uno hecho por tneles subterrneos. En vez de gastar 100 en hacer un subterrneo y demorar dcadas en la construccin, Ro ha gastado 7 en la implementacin del BRT, con la posibilidad de poder construir su subterrneo por 33 cuando sea necesario.

Para la generacin de cualquier sistema de transporte, la decisin compleja, a nivel poltico, es la de optar por ceder espacio del trnsito privado al transporte pblico o hacerlo mediante un sistema de tneles sin generar mayor impacto al parque automotor. Esta ltima cuesta tres veces ms.

Si seguimos el ejemplo de Ro, Lima podra tener las lneas 3 a 6 del metro en forma de BRT antes de que terminen lalnea 2. Con nuestra infraestructura vial a punto del colapso, tendramos una solucin en poco tiempo. Cuando llegue el da para construir el subterrneo, tendramos el espacio y la posibilidad de hacerlo por mucho menos.

Ceder espacio para ganarlo ms adelante puede ser la solucin. La aspiracin de tener un subterrneo en el futuro no tiene que quitar la posibilidad de tener el sistema que necesitamos hoy.