La movilización que esta mañana realizaron unos 2000 trabajadores chiclayanos del sector público, en rechazo a la Ley del Servicio Civil, registró momentos de alta tensión en el cruce de las avenidas Leonardo Ortíz y Elías Aguirre. Allí la masa fue reprimida por la Policía cuando paseaba un ataúd, con la foto del presidente Ollanta Humala, e intentaba ingresar al Parque Principal de la Ciudad de la Amistad.
El grupo de manifestantes trató de retener el símbolo, hecho de cartón, con que representaron la indiferencia del Gobierno, pero los agentes consiguieron arrebatárselo. Esa disputa fue la que devino en empujones y forcejeos.
La Ley del Servicio Civil es atentatoria y violatoria de nuestros derechos como trabajadores públicos. Aquí estamos todos los sectores estatales, no falta ni uno. Desde empleados del gobierno regional, del sector Salud, Educación, Justicia, del Poder Judicial, universidades y municipios, dijo el secretario general de la CGTP Wilmer Antón tras la gresca.
La movilización siguió su curso por otras calles del centro de Chiclayo y en la intersección de Balta con Bolognesi, los servidores públicos quemaron un ataúd similar al que la Policía les quitó.
“El Gobierno tiene una intencionalidad que se apruebe esa ley porque ya hay un compromiso con el Banco Mundial, el FMI y las grandes transnacionales. Este proyecto llevará a que el país tenga mano de obra barata para que los ricos se hagan más ricos y los pobres solo vivan con sueldo de hambre”, sostuvo el dirigente.
Acotó que de no ser atendido su petitorio para que no proceda la norma en cuestión, los empleados radicalizarán su lucha “con estrategias más contundentes”. En tanto, adelantó que mañana llegarán a Lima integrantes de los sindicatos chiclayanos para plegarse aquí a las protestas.