WILFREDO SANDOVAL Corresponsal en Chiclayo

Con el descerraje y demolición de local ubicado en la cuadra 25 de la avenida Leguía, en el límite de Chiclayo y José Leonardo Ortiz, culminó esta tarde una diligencia judicial que aún mantiene en litigio al Obispado de Chiclayo y al empresario Luciano Llanos Campos.

Reineiro Díaz Tarrillo, titular del Segundo Juzgado de Investigación Preparatoria de Chiclayo, fue el encargado de ejecutar la sentencia que dio la razón al colegio privado Santo Toribio de Mogrovejo de Chiclayo, institución que depende del Obispado de Chiclayo.

Cerca de las 5 de la tarde, el magistrado ordenó el descerraje y la demolición de un local que había sido construido por el empresario Luciano Llanos. En el lugar funcionaba una tienda de repuestos de motocicletas. La diligencia se realizó en medio de gran tensión, ante la estricta vigilancia de medio centenar de policías y un grupo de trabajadores de construcción civil contratados por el colegio particular.

El director del colegio Santo Toribio de Mogrovejo, Julio César Espinoza Delgado, argumentó que el empresario invadió hace varios años el terreno que pertenece al Obispado de Chiclayo.

En tanto, Luciano Llanos señaló que adquirió el terreno en julio del 2004 como parte de un lote mayor de 19.142 metros cuadrados. Precisó que el colegio habría invadido la propiedad que adquirió hace nueve años.

Las autoridades judiciales informaron que actualmente existe en litigio un terreno de 629 metros cuadrados, 500 de los cuales forman parte de las cocheras del centro educativo.

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