Un hecho curioso se ha dado en el Cuerpo de Bomberos. Contraloría General de la República emitió una resolución en la que recomendó suspender al comandante Mario Casaretto por haber entregado a las comandancias de Lima Sur, Norte, Centro y a la Quinta Comandancia del Callao mil uniformes para los agentes voluntarios.
La sanción para Casaretto contempla que por 180 días no podrá realizar labores administrativas, pero sí cumpliendo sus labores de voluntariado. Según comentó el oficial, acata la medida desde hace un mes y diez días, pero aclaró que no ha cometido algún delito ni está involucrado en una acción dolosa.
¿Qué pasó entonces? Casaretto explicó que como parte de su cargo como director de Logística, asumido el 26 de octubre, repartió para cada comandancia 250 uniformes que se encontraban guardados en el almacén a pesar de existir un contrato ya procesado con el proveedor. Sin embargo, había una denuncia al proceso de licitación de los uniformes, lo que estaba en investigación. Es decir, no se podían tocar los implementos tan necesarios para los hombres de rojo.
CURIOSA CONTRADICCIÓN El comandante también comentó que la decisión de la Contraloría menciona que es funcionario público y por eso se le sanciona, pero él desconocía que estaba catalogado así.
“Todos los bomberos entendemos que el funcionario público es el que trabaja ocho horas, recibe sueldo y descansa sábados y domingos y todo los feriados. Nosotros no, los bomberos trabajamos minuto a minuto los 365 días del año. En ningún momento entramos al Cuerpo de Bomberos para pertenecer a una entidad pública del Estado, pero lamentablemente ahora se encuentra considerado como una entidad pública”, indicó.
Además, dijo que la resolución de la Contraloría menciona que “no podrá cobrar ninguna de sus remuneraciones”.
“Y creo que ahí hay algún un error, porque nosotros no cobramos sueldo. Jamás hemos percibido un sueldo del Estado, porque nuestro trabajo es voluntario”, dijo sorprendido a Canal N.